Soria será la primera provincia de España que va a diseñar su estrategia de adaptación de sus bosques y de sus actividades al cambio climático. El Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria de Castilla y León (Cesefor) analiza el clima de los últimos 50 años en la provincia de Soria- la evaluación de las precipitaciones y temperaturas- con el objetivo de predecir qué puede pasar en un futuro en sus bosques y tierras de cultivo; poner medidas y conseguir un territorio “resiliente y resistente» a los envites del cambio climático.
El análisis de la evolución climática se enmarca dentro del proyecto europeo Soria Forest Adapt, coordinado por la Fundación Global Nature y, a pesar de que se enmarca en Soria, el modelo resultante podrá ser utilizado en otras provincias limítrofes como Burgos que cuentan con ecosistemas y climas similares.
El director gerente del Cesefor, Pablo Sabín, recalcó que se intenta conocer cómo puede cambiar la vegetación de Soria en el futuro y cómo realizar las nuevas repoblaciones. “Se trata de saber si en atención a los escenarios de cambio climático del Ministerio Transición Ecológica deben permanecer determinados hábitats o por el contrario hay que repoblar con otras plantaciones, por ejemplo, cambiar de pino silvestre a pino negral», resumió.
Al respecto, señaló que los resultados básicos de la investigación serán “claves” para la gestión forestal, y agregó que se trata de incluir medidas de adaptación en los bosques para que no sufran un cambio brusco.
Asimismo, precisó que se determinará cómo adaptar la naturaleza para estar más protegidos frente a los incendios y que la recuperación del terreno frente a los mismos sea más rápida. «Se trata de saber cómo adaptarse en el futuro debido a que los incendios se van a producir porque forma parte de la naturaleza y si hay combustible hay fuego. No obstante, se intenta que sean lo más reducido posible y que sus impactos sean menores”, precisó para insistir que es necesario ‘repensar’ las actuaciones en materia de incendios.
El proyecto también determinará cómo adaptar la actividad humana a las nuevas situaciones, ya que con los cambios de temperaturas en las épocas que se realizaban determinadas tareas agrícolas o aprovechamientos tienen que variar, es decir, se planteará dotar al sector primario de un sistema más flexible, dependiendo de las condiciones climáticas.
“Se trata de encontrar un sistema dinámico dependiendo de las condiciones climáticas. Por ejemplo, los resineros, dependiendo del año y las condiciones del clima, se variará los períodos en los que se puede resinar”, redundó para agregar que todavía quedan dos años de investigación y que las soluciones definitivas y concretas llegarán al finalizar el mismo.
El gerente de Cesefor precisó que las conclusiones no podrán a otras provincias de la Comunidad con un clima diferente, pero el análisis de las variables climáticas sí incluyen otros lugares de Castilla y León con el objetivo de que se puedan aplicar en otros sitios con diferente soluciones adaptadas a sus ecosistemas arbolados.