M.ª Victoria Carreras es economista de formación y naturalista de pasión, ya que nos confirma ser una amante de la naturaleza desde bien pequeña. Además, su experiencia en el sector forestar viene por su arraigo a su tierra, gracias a que puede compaginar su actividad al frente de ANDA Cowork con la gestión del cultivo del chopo en las vegas de su finca familiar. Asegura que está siendo todo un reto apasionante. Y que estos grandes retos encajan a la perfección con su filosofía de trabajo a la que denomina “una revolución verde”.

A continuación nos explica cómo surgió la iniciativa, cuáles son los principales objetivos de la MARJAL y la situación de los propietarios productores de chopo en Granada.

¿Qué es MARJAL y por qué surge esta iniciativa?

El chopo actualmente se enmarca en la provincia de Granada dentro del sector primario de producción, viéndose afectado por importantes cambios, llegando a ser un cultivo en regresión en nuestro territorio, poniendo en riesgo los innumerables beneficios ambientales de las choperas, con implicaciones negativas directas sobre la economía, la sociedad, etc.

MARJAL emerge ante los nuevos retos que se nos plantean en la conservación y gestión de manera racional de las tierras agrarias para la producción sostenible de recursos naturales, y como respuesta a este continuo descenso de la superficie de choperas en Granada y Andalucía. Entre otras razones, por el desmembramiento del sector del chopo, nace la que es la primera agrupación de productores de chopo de España. Que se constituyó en Asamblea el 14 de mayo de 2022, bajo el auspicio e impulso del proyecto LIFE Wood for Future.

Actualmente, ¿cuántas hectáreas de chopo y cuántos productores reúne la Asociación? ¿cuál es el verdadero potencial de MARJAL, en Granada y en provincias limítrofes?

La Agrupación se constituyó con 73 propietarios de Andalucía que suman un total de 1.273 hectáreas de superficie de choperas. Se pretende crear un sector primario del chopo, organizado y altamente tecnificado, que sea capaz de generar madera certificada de calidad, que permita dar el suministro necesario para la implantación de una industria local de productos de alto valor añadido, en el contexto de una Revolución Verde de Andalucía, a la vez que contribuir de forma activa al reto demográfico de áreas rurales, la mitigación de cambio climático, el aumento de la biodiversidad, la disminución de la contaminación, la suavización de las temperaturas, el filtrado de aguas contaminadas por fosfatos y nitratos que pasan al acuífero y al manteniendo de un paisaje culturalmente arraigado en la sociedad y sus manifestaciones culturales (literatura, pintura, etc.), contribuyendo así también al ocio y el ecoturismo.

MARJAL ha emergido en el marco de LIFE Wood for Future. ¿Cómo de importante es este proyecto para haber unido e impulsado la actividad de los productores de chopo en la Vega de Granada?

La identificación de esta realidad permitió visualizar la oportunidad de desarrollar un sector, que con la aportación del conocimiento de la Universidad de Granada, la visión empresarial y de expertos, está avanzando en el desarrollo de un sector que incide no solo en la producción, sino también en la transformación. Todo ello con un impacto muy directo sobre el suelo y la calidad de vida de las personas de nuestro territorio, y con una vinculación a los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por las Naciones Unidas.

En su presentación oficial al sector MARJAL declaró que entre sus objetivos está la inclusión del cultivo del chopo en las ayudas de la PAC. ¿Han avanzado Vds. en este sentido? A fecha de hoy, ¿lo consideran aún viable y una prioridad para la Asociación?

Esta es una de las prioridades en las que estamos trabajando, y vamos avanzando, manteniendo reuniones con distintas instituciones, en donde está teniendo muy buena acogida.

Los principales objetivos de MARJAL y COSE -Confederación de Organizaciones de Selvicultores de España-, donde está integrada, son realizar una gestión común de las choperas para obtener madera de calidad, sostenible y certificada; planificar el recurso para suministrar de forma constante a la industria; desarrollar una marca con denominación de origen; vender o subastar lotes conjuntos de madera para conseguir mejores precios de cara a estabilizar la producción; ejercer una defensa común de sus intereses de cara a los seguros agrarios, ayudas de la PAC y venta de créditos de carbono para los mercados de emisiones; y actuar como un interlocutor único ante las administraciones.

¿En qué estadio se encuentra cada uno de estos objetivos?

En nuestra primera Asamblea, celebrada el pasado 27 de mayo de 2023, revisamos cómo vamos avanzando en cada de estos puntos. Cada uno va a su ritmo, pero avanzamos rápido.

La gestión común está realizándose con una empresa especializada en gestión forestal, y será un primer paso para seguir cumpliendo con los siguientes.

Este es un proceso de profesionalización y maduración, en el que estamos trabajando de forma conjunta junto a todos los agrupados, que hará que estos hitos sean una realidad muy pronto.

El chopo es un cultivo estratégico en la provincia de Granada, y las choperas, además de mantener vivo el entorno rural cumpliendo su función tradicional, puede dar respuesta a los nuevos usos y demandas sociales, ambientales y económicas ofreciendo productos que responden a las expectativas de nuestra sociedad: creación de empleo, desarrollo industrial y múltiples beneficios ambientales, culturales y paisajísticos. Así que tenemos un gran compromiso y responsabilidad desde MARJAL, para afianzarlo.

Le pedimos una valoración de la situación de los propietarios productores de chopo en Granada. ¿Es viable su actividad sin incentivos y con la irregularidad del mercado y volatilidad de los precios de la madera?

La clave de todo pasa por la profesionalización del sector. Estamos trabajando por un sector organizado y altamente tecnificado, que sea capaz de generar madera certificada de calidad, en el contexto de una Revolución Verde de Andalucía.

Nuestra selvicultura centrada en conseguir madera de calidad y certificada nos dará la credibilidad suficiente para conseguir esos incentivos y esa regularidad en el mercado.

¿Ha calado en la Administración y en la sociedad el mensaje de que el cultivo del chopo contribuye a reducir la contaminación en la propia ciudad de Granada?

Ha calado en la sociedad y en las instituciones que es un actor clave en el contexto de una Revolución Verde de Andalucía. Demostrándose que contribuye de forma activa en la mitigación del cambio climático, aumenta la biodiversidad, disminuye la contaminación, suaviza las temperaturas, además de ser un filtro natural de las aguas contaminadas por fosfatos y nitratos que pasan al acuífero.

¿Está próxima la decisión de adjudicar la Azucarera de San Isidro como sede de la Agrupación?

El compromiso de la Universidad de Granada en el proyecto es muy importante. Confiamos sea una realidad el traslado de la sede de la Agrupación, así como otras iniciativas que ayuden a visualizar y desarrollar el sector del chopo y la madera en Granada.