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BNP Paribas lanza un fondo para invertir en bosques certificados FSC

Invertirá en silvicultura sostenible para combatir el cambio climático y mejorar la biodiversidad.

BNP Paribas Asset Management ha lanzado el Fondo BNP Paribas Future Forest Fund, en asociación con International Woodland Company (IWC), para responder a la demanda mundial de inversiones en tierras madereras gestionadas de forma sostenible. Este fondo está clasificado en el artículo 9 bajo SFDR e invertirá en silvicultura sostenible para generar rendimientos financieros a los inversores y combinar prácticas de inversión sostenible para combatir el cambio climático, mejorar la resiliencia de los activos y mejorar la biodiversidad.

El Forest Stewardship Council (FSC) felicita a BNP Paribas Asset Management «por su compromiso con la silvicultura sostenible al utilizar el sistema de certificación más confiable para la gestión forestal en sus inversiones». Los criterios de inversión del Forest Future Fund, la certificación del Forest Stewardship Council (FSC), garantizarán que estos proyectos generen ganancias económicas, sociales y ambientales mensurables y verificables para los inversores y el mundo.

La organización agradece la oportunidad de interactuar con los inversores y las empresas de gestión de activos sobre cómo el uso de la certificación FSC puede contribuir a lograr objetivos sostenibles y satisfacer sus necesidades de informes ESG.

INVERSIONES FORESTALES SOSTENIBLES

En su nota de prensa corporativa, BNP Paribas AM destaca su asociación con el experto en capital natural IWC. IWC es un especialista mundial en capital natural, propiedad mayoritaria de BNPP AM y con sede en Copenhague, con más de 30 años de experiencia en la prestación de servicios de gestión de inversiones y asesoramiento en inversiones forestales sostenibles, inversiones agrícolas y restauración de ecosistemas.

Las inversiones forestales sostenibles son una oportunidad para los inversores que buscan alinear los beneficios ambientales y sociales con los objetivos financieros. De hecho, las inversiones forestales pueden desempeñar un papel importante en las carteras de inversión, ya que pueden ofrecer atractivos rendimientos ajustados al riesgo a largo plazo, ingresos anuales estables, beneficios de diversificación debido a la baja correlación con otras clases de activos y propiedades de cobertura contra la inflación. Además, la silvicultura sostenible es clave en la lucha contra el cambio climático, ya que los árboles son fundamentales para eliminar y almacenar carbono y pueden salvaguardar y mejorar la biodiversidad terrestre al tiempo que ofrecen protección contra la deforestación.

Basado en un «enfoque de inversión de riesgo controlado», a través de inversiones en tierras madereras básicas en geografías desarrolladas (Estados Unidos, Oceanía, Europa), «el BNP Paribas Future Forest Fund tiene un sólido marco ESG que guía la producción de madera sostenible», indica esta entidad. El Fondo solo invertirá en bosques certificados o certificables por el FSC (Forest Stewardship Council) y proporcionará a sus inversores datos complementarios para sus objetivos contables de gases de efecto invernadero y las necesidades de información de la UE u otras normativas.

El Fondo tiene como objetivo un tamaño de 500 millones de dólares (750 millones de dólares de capitalización dura) y ha tenido un primer cierre de 130 millones de dólares en noviembre. La cartera objetivo constará de 8 a 12 activos en los EE. UU. (sur, noreste y noroeste del Pacífico), Australia, Nueva Zelanda y Europa.

BNP Paribas AM ha subrayado, en su comunicación oficial, que el Fondo BNP Paribas Future Forest Fund aborda las principales tendencias macroeconómicas que indican una creciente demanda de madera. En los últimos 60 años, la demanda mundial de productos madereros se ha duplicado y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) prevé que la demanda de madera aumentará entre un 37 y un 60 por ciento entre 2020 y 2050. «El aumento sostenido de la demanda de productos madereros se debe a varias megatendencias, como el crecimiento de la población, la urbanización, el aumento de la renta per cápita y la transición ecológica», señala esta entidad financiera.