por

ARQUIMA confirma en Construtec el interés por la construcción pasiva

Los ejes temáticos de la edición de la feria este año han sido la sostenibilidad, la innovación y la tecnología.

La compañía especializada en construcción pasiva ARQUIMA ha participado, como empresa colaboradora de la Plataforma de la Edificación Pasivhaus (PEP), en la edición 2018 de Construtec, Salón Internacional de Materiales, Técnicas y Soluciones Constructivas, celebrado en IFEMA de Madrid del 13 al 16 de noviembre.

Con el lema «Transforming the way we build a Green World», los ejes temáticos de la edición de la feria este año han sido la sostenibilidad, la innovación y la tecnología y se ha se ha confirmado la tendencia creciente de la construcción pasiva y sostenible, tanto por parte de los visitantes, como de las empresas expositoras. Bajo el paraguas de ePower&Building, la platafoma comercial y punto de encuentro sectorial e internacional ha reunido a más de 1.600 empresas expositoras y a más de 80.000 profesionales procedentes de 100 países.

ARQUIMA ha participado de manera activa en el evento europeo de referencia con un stand compartido con otras empresas miembros de PEP, por el que, durante cuatro días, han pasado profesionales de todos los perfiles, como arquitectos, aparejadores, interioristas, constructores, promotores, instaladores y prescriptores interesados en conocer su sistema de construcción pasiva industrializado.

Durante la Feria, y a través del GBCe (Green Building Council España), se han presentado las guías de la madera para usuarios y técnicos en las que ha colaborado ARQUIMA: «En madera, otra forma de construir. El material constructivo sostenible del siglo XXI» y «En madera, otra forma de vivir. Una guía para consumidores y usuarios». Las guías, que divulgan los beneficios de la construcción en madera, han sido editadas este año por el FSC con la cofinanciación del STTC y del MAPAMA (Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente).

 

EL SISTEMA CONSTRUCTIVO

ARQUIMA construye edificios de consumo energético nulo o casi nulo y certificados passivhaus, con criterios de arquitectura bioclimática, pasiva y de máxima eficiencia energética y fue pionera en construcción pasiva y sostenible en nuestro país desarrollando un sistema constructivo propio en 2008.

 

 

Un sistema que, además de ser eficiente energéticamente, también apuesta por la salud, por un estilo de vida diferente y por la vertiente ecológica en cuanto a la elección de los materiales. El tipo de madera utilizado por ARQUIMA para la envolvente de los edificios es el abeto KVH certificado y materiales con una mínima huella de carbono, como la madera de bosques gestionados de manera sostenible y certificados con los sellos PEFC y FSC.

Este sistema aporta más rapidez de ejecución, más confort térmico y calidad del aire interior y un control de calidad muy superior al de la construcción tradicional

El proceso de fabricación de las obras se realiza completamente en taller y las piezas se transportan en 2D en camiones hasta el lugar donde hay que edificar. Para una casa de unos 200 metros cuadrados se invierten unos siete días para la fabricación, siete días de montaje y ajustes ‘in situ’ y unos tres meses para los acabados. Este sistema aporta más rapidez de ejecución, más confort térmico y calidad del aire interior y un control de calidad muy superior al de la construcción tradicional.

ARQUIMA fabrica todo tipo de proyectos de edificación, desde viviendas unifamiliares de una sola planta hasta edificios en altura para cualquier tipo de uso, con su propio concepto de construcción modular de entramado ligero de madera. También ofrece la posibilidad de hacer proyectos “llave en mano”, incluyendo la cimentación e incluso el jardín y la piscina, con diez años de garantía. En 2015 construyó en Barcelona, el primer edificio plurifamiliar en altura de España realizado con este sistema, que dispone de cuatro hojas sobre cinco del Certificado Verde del GBCe.

La madera es más sostenible porque tiene una huella de carbono muy inferior al hormigón, debido a que la energía necesaria para su obtención es infinitamente inferior, ya que durante su periodo de vida absorbe gran cantidad de CO2, y además, es un material reciclable.

Su durabilidad también es superior a la del hormigón o el acero: existen casas de madera con cientos de años. Si se coloca la madera idónea, con el grado de humedad adecuado y no permitimos la entreada de xilófagos, la madera puede ser eterna.

El coste económico constructivo difiere muy poco al de la construcción tradicional pero el ahorro energético, durante toda la vida útil del edificio, es de hasta un 90%. El plazo de ejecución puede llegar a reducir en un 50% al de una obra tradicional, lo que puede generar muchos beneficios en sectores como el hotelero o el de la promoción inmobiliaria.