Patrocinadas por Grup Orell, Fusteria Galmés, Fusteria Font, Grupo Carinbisa y Fabricados Roi; todos ellos miembros de ASOMA (Asociación Española de Fabricantes de Ventanas de Madera y Mixtas Madera-Aluminio), estas jornadas fueron organizadas por la propia ASOMA y COAIB, en colaboración con CETEBAL y ESCOLA COAIB y registraron la asistencia de setenta arquitectos de las Islas Baleares.
Normativa vigente
Los fabricantes españoles de ventanas de madera disponen de perfiles con prestaciones diferenciadas (madera maciza, madera laminada y madera recubierta de aluminio al exterior). En Baleares existen fabricantes de ventanas tecnológicamente preparados y con el know-how suficiente para competir en el mercado europeo con productos altamente cualificados, que además permiten un alto grado de personalización. Todos ellos están avalados por el Centre Tecnologic Balear de la Fusta.
La madera compite en Mallorca
Mallorca ama la madera. Y cuenta con centenares de carpinterías; la mayoría de ellas con varias generaciones de experiencia y conocimiento en cerramiento exterior.
En los años 90, este estudio de arquitectura apostaba por la carpintería metálica en sus proyectos «porque disponíamos de más información y el fabricante lo vendía muy bien -explica Llorenç Brunet-. Todos eludíamos la obligación del mantenimiento de las caras exteriores de los cerramientos y valorábamos las diferentes posibilidades estéticas que ofrecía, la mayor resistencia de los perfiles y, sobre todo, la potencia del aluminio o el acero inoxidable en la visión de la envolvente exterior de un edificio respecto a su entorno». Hace 15 años, todas estas ideas eran recurrentes entre los arquitectos baleares. Había arraigado la convicción de que el aluminio era técnicamente superior a la madera.
Con el tiempo, surgen dudas. La evolución tecnológica en la industria de la madera justifica la competencia de este material con la carpintería metálica. «Hoy la madera compite por eficiencia técnica, por durabilidad y mantenimiento, por capacidad mecánica de los perfiles y por posibilidades estéticas, y también compite económicamente», afirma rotundo Llorenç Brunet.
Barnices al Agua: Máximas prestaciones con un mantenimiento mínimo
El problema de la madera se repite en todas partes: el agua y el sol. En el pasado, las ventanas se fabricaban con un diseño defectuoso y sobre los perfiles se aplicaba acabados en base poliuretano, lo cual comportaba problemas a medio plazo.
Según el ponente, «el estándar actual de durabilidad de la carpintería de la madera es cinco años, sin mantenimiento ninguno. -aclaró-. Para un correcto mantenimiento se recomienda una limpieza con agua y jabones neutros, y una restauración (pintado de nuevo con barniz en base agua o lasur), con una frecuencia media de dos años.»
Juan José Hoyo expuso a los setenta arquitectos reunidos por ASOMA, CETEBAL y COAIB en Palma de Mallorca y Manacor las enormes posibilidades de acabado que hoy tiene un perfil de madera con productos en base agua, así como el gran avance de la tecnología de la protección frente a agentes xilófagos y hongos de pudrición. «Además, la industria persigue mejorar el comportamiento de la madera en un futuro inmediato: llegan las maderas técnicas», concluyó el técnico de Akzo Nobel Coatings.
Experiencias en madera
En Baleares el arquitecto trabaja con la Luz: las persianas conceden a sus proyectos espacios íntimos y protegidos.
Duch y Pizà mostraron a los asistentes a las jornadas ventanas de madera en construcciones sencillas, nobles, integradas en la arquitectura local. «Se erigen habitualmente en protagonistas de las estancias, sin limitaciones en formas y dimensiones -comentaron-. Otros materiales se nos antojan agresivos con el edificio y su entorno; una ventana de madera es garantía de nobleza.»
«Añoramos la magnífica carpintería de madera de los años 20 en Palma -concluyó Francisco Pizà-. Si olvidamos este patrimonio perderemos nuestra identidad.»
La ventana de Madera: La única ventana «verde»
«Es importante que profesionales y particulares tengan información -declamó ante los arquitectos baleares-. La ventana de madera es la más ecológica: es la que emite menos CO2 en su ciclo de vida y la que requiere menor consumo de energía en su fabricación. Sus residuos son valorizables, en forma de biomasa, tableros, etc. El uso de productos de madera garantiza una gestión forestal sostenible y contribuye a la lucha contra el efecto invernadero en el Planeta, asegurando el crecimiento y la mejora continua de los bosques.