Pepe Blasco vive el mueble, se preocupa por el mueble, y aspira a que las empresas españolas y el sector estén bien situados, como merecen. «Me gustan los proyectos y los objetivos, y entiendo que eso se consigue con los grupos de trabajo», afirma.
Uno de sus primeros logros ha sido la firma de un acuerdo de colaboración con FEDERLEGNO…
Nuestro acuerdo con FEDERLEGNO es un hito. Nunca el contacto con la patronal italiana fue tan estrecho. La colaboración nace con tres iniciativas:
• La interlocución de FEDERLEGNO en España se hará a través de FEDERMUEBLE y viceversa.
• Juntos defenderemos el diseño, la innovación y la calidad, frente a los países que ataquen o amenacen estos argumentos. Si a nosotros se nos exige ciertos mínimos, ha de exigirse exactamente lo mismo a los muebles importados; ni más ni menos.
• Iremos juntos a varias ferias internacionales. Ambas organizaciones somos concientes de la importancia de salir al exterior.
Naturalmente, el marco de colaboración no termina aquí. Conforme hablamos surgen ideas y muchas se plasmarán en proyectos.
¿Como cuáles?
Por ejemplo, junto a la homóloga alemana todos queremos potenciar EFIC, la gran patronal europea del mueble. Con el fin último de representar a los fabricantes europeos, unidos, desde Bruselas.
¿Cómo es el sector español del mueble que Vd. tiene en mente para un futuro próximo?
El sector español del mueble es un sector maduro y preparado. Sigue siendo fuerte, con numerosas empresas fuertes. Pero nos hace falta salir. Tenemos que exportar más. Porque significa que creces, como empresario y como empresa.
Sólo el 20% de los fabricantes españoles de muebles exportan. Y sólo exportando estaremos aún mejor preparados y seremos aún más fuertes. No es fácil, pero ahí está la riqueza y el futuro del sector.
¿Qué papel puede desempeñar FEDERMUEBLE para ayudar a los empresarios en este sentido?
Hemos de racionalizar los recursos disponibles para que las empresas se asomen al exterior. Queremos que el ICEX tenga un proyecto empresarial para exportar. Estaremos a su lado apoyando todos sus movimientos pero, a la vez, denunciando los que sean incorrectos. No estamos discutiendo los recursos, pero sí cuestionamos cómo se administran.
Tiene que haber un plan. Un sector y un país necesitan un proyecto de exportación, una estrategia. Lo que busca FEDERMUEBLE es exportar con una estrategia de país “Made in Spain”.
¿Es posible salir adelante sin financiación?
Es imposible fabricar muebles sin financiación. Igual que no se puede fabricar sin materias primas, sin máquinas o sin personal. El crédito hoy prácticamente no fluye. A las empresas y a las familias no llega nada. Y el sector del mueble no es culpable del agujero que tiene el sector financiero. Sin embargo, estamos pagando las consecuencias.
¿Podría darse una concentración de empresas fabricantes en el sector?
En estos momentos difíciles en los que lo más importante es subsistir, yo sí apoyo e impulso las alianzas. No es una cuestión fácil, pero es necesaria. Hoy se están produciendo más alianzas que fusiones, aunque las segundas también se darán, porque para exportar es vital cobrar un tamaño razonable. Por ello, de la mano de las administraciones, urge trazar un marco regulador para que estas operaciones sean fáciles.
Hace pocos años se hablaba de potenciar la industria auxiliar y la subcontratación de procesos. ¿Ya no es válido este discurso en España?
Aliarse consiste en dar salida a las empresas más pequeñas, para que apoyen a las grandes y éstas, a su vez, sean más competitivas en los mercados interior y exterior.
¿Por qué hoy hablamos de Hábitat, más que de Mueble?
Existe una inquietud empresarial que excede al marco del Mueble y crece en torno a la organización del interiorismo. Por eso hemos creado el Foro Empresarial del Hábitat, una asociación donde empresas líderes del sector dialogan y construyen, en un ambiente muy participativo. Sumar al mobiliario de hogar el de cocina y el de oficina, la iluminación, el textil e incluso el segmento del descanso está resultando muy enriquecedor; existen numerosos problemas y proyectos comunes.
¿Sirven los modelos vigentes de distribución de mueble español?
Yo lo tengo muy claro. El modelo actual de distribución, sí o sí, tiene que cambiar. Cuanto antes dialoguemos los empresarios de la fabricación y la distribución, mejor para todos. Lo que hasta ahora ha servido ya no sirve. Y no va a servir. No nos ahoguemos en el recuerdo de cómo funcionaban las cosas antes. Debemos replantear la situación, ya.
¿Con IKEA procede enfrentarse, o negociar?
IKEA es, sobre todo, distribución. Desde la patronal vemos que IKEA puede ser algo bueno para el sector, porque compra mucho mueble. Si nosotros fabricamos y ellos compran, puede haber un acuerdo.
Lo que sí quiere FEDERMUEBLE es que haya unos contratos transparentes, con la doble vía de las obligaciones y los derechos, para ambas partes. No puede ser que los empresarios españoles sólo tengan obligaciones.
¿Habrá un Plan Renove para el Mueble?
Ojalá. Aunque no queremos un plan renove «al uso». No nos interesa trasladar las ventas a una estacionalidad en el año.
El consumo interno está deprimido, y lo estará por un tiempo. Con medidas fiscales intentamos incentivarlo. Por dos vías: con un IVA reducido y con desgravación. Además, con estas medidas contribuiremos a reducir y/o erradicar la economía sumergida en nuestro sector. Así, el país se dotará de más recursos y las empresas lucharán en el mercado de igual a igual.
Finalmente, lograremos mantener los puestos de trabajo y se abrirá la posibilidad de crearlos.
¿Se celebran anualmente demasiadas ferias del ramo en nuestro país?
Como fabricante, yo no puedo decir a ningún otro fabricante a qué ferias debe de ir. Creo que las ferias deben de ser una herramienta comercial, y lógicamente las empresas acuden a las ferias que mayor retorno les dan. Dicho esto, considero que a nivel nacional no es bueno celebrar más de una feria. Países de referencia en el ramo como Italia sólo tienen una feria y fuerte, donde exponen todos.
La internacionalidad obtenida y perseguida por varios certámenes ha debilitado a todos ellos. Es una equivocación. Debemos apostar por una única feria, donde estemos todos los fabricantes, y trabajar por que sea muy fuerte. Sin menoscabo de las ferias locales y afines. Porque en el momento en que perdamos la referencia como sector y como país, estamos perdiendo prestigio, mercado y futuro en el mundo.
A todos nos beneficiaría hacer una gran feria en casa, en lugar de vernos obligados a salir. La feria debe ser un instrumento estratégico para potenciar la marca España.
¿Es saludable la imagen del sector español del mueble ante la sociedad?
El reto es crear una cultura que valore el mueble español en los hogares españoles, y que ésta sea visible y perviva en el tiempo. El mueble español es un mueble bien hecho, muy trabajado. Y que además, aún da empleo a muchos españoles.
Nosotros debemos explicar bien al consumidor qué es lo que está comprando, igual que cuando éste adquiere un coche o un electrodoméstico. No podemos reducir el argumentario de venta de un mueble a su precio.
A pesar de la crisis, ¿han podido las fábricas españolas de muebles continuar tecnológicamente «a la última»?
No tenemos nada que envidiar a otros países productores de referencia, como por ejemplo Italia. Con todo lo que está cayendo, mantenemos nuestro «saber hacer» y somos competitivos. Tenemos tecnología, innovamos y diseño. Pasó la época en que España copiaba. Hoy los diseñadores están integrados dentro del proceso productivo de muchas firmas. Lo que nos hace falta es contar con apoyos (que no subvenciones), como pueden tener otros sectores. Para merecerlos, hemos de concebir un buen proyecto empresarial, para el sector y para la sociedad.