I&E FOREST PANELS, S.L., representante en España de LAMETT, presentó este año en Architect@Work Madrid la nueva colección de suelos de interior en roble de la firma belga, bautizada con el nombre de “Carcassonne”. Se trata de una colección de madera de roble aceitada, muy seleccionada, extraída de troncos de 120 años o más, muy demanda en la actualidad por los arquitectos.
Lo que se busca con estos suelos es conseguir el efecto natural que dan las propias grietas del árbol. No se trata de algo hecho con posterioridad a la madera sino que se muestra tal cual, aserrada, y con todos sus cortes y “defectos naturales”, explica Simón Casas, gerente de I&E FOREST PANELS, S.L.
Es una colección de calidad media-alta, elaborada con un material muy especial en el que se consigue un aspecto extremadamente rústico a partir de la propia selección de las tablas de madera, con unos criterios muy estrictos.
Son lamas anchas y largas, fabricadas en cuatro colores; unas maderas que pueden servir también para el recubrimiento de paredes y que, tal y como admite Simón Casas, dan «mucho juego», combinándose a la perfección con todo tipo de decorados.
Un producto que tiene demanda en el perfil de cliente que asiste a este tipo de ferias y que se usa en viviendas pero cada vez más también en locales comerciales (tiendas, hoteles, restaurantes…), e incluso en oficinas, recepciones, espacios comunes…). Lo demandan directamente los arquitectos y decoradores.
En efecto, hoy día se busca para diseñar los interiores materiales naturales, y la propuesta de LAMETT se ajusta absolutamente a ello.
Su tratamiento es, esencialmente, aceite. En cuanto a su cuidado y mantenimiento, Simón Casas explica que los suelos aceitados requieren sólo un enjabonado para limpiarlo, y pasados unos dos años aconseja que se vuelvan a aceitar, sin que para ello sea necesario contratar a un profesional sino que «basta con que se haga una limpieza sencilla y normal, para nutrir la madera y protegerla» concluye.
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