El corcho y San Vicente de Alcántara han sido compañeros inseparables desde mediados del siglo XIX. Desde entonces, el corcho se ha integrado en todos los ámbitos de la vida local, desde la esfera económica, la más importante, hasta el ámbito más íntimo y cotidiano. El Museo del Corcho presenta la identidad de San Vicente a partir de su vinculación con este producto natural.
Para acercar al visitante al mundo del corcho, el Museo, integrado en la Red de Museos de Extremadura, cuenta con una sala, dividida en distintos espacios, para su exposición permanente. Todo ello explicado de una forma entretenida mediante piezas, paneles y audiovisuales.
En primer lugar, el diccionario del corcho muestra varias palabras clave del mundo corchero. A continuación, nos encontramos con el alcornoque y su entorno, el alcornocal, que constituye un verdadero hogar para especies animales amenazadas. Además, se explican las características de este árbol y de su corteza, tan valiosa para la vida de San Vicente de Alcántara.
Para describir qué es el corcho, cuentan con una pieza fundamental en este sentido, es una rebanada del tronco de un alcornoque a la que llamamos anillos de experiencia. Se trata del corte transversal del alcornoque, el anillo situado entre el corcho y la madera recibe el nombre de capa madre, por el que circula la sabia elaboradora.
Por otra parte, en este espacio también podemos contemplar un audiovisual adaptado, sobre todo a los más pequeños ya que es una presentación en tres dimensiones. Muestra el crecimiento del alcornoque desde que es bellota, a partir de la cual, enterrada en la tierra, el alcornoque va creciendo poco a poco hasta que se convierte en árbol grande y le sale el primer corcho. A continuación, se le despega el corcho, para demostrar cómo es el proceso.
En el siguiente espacio podemos adentrarnos en los primeros usos del corcho, que se remontan a hace unos 3.000 años, y conocer además los primeros asentamientos de la industria corchera en España y Extremadura, y su llegada a San Vicente de Alcántara en el 1858. También conoceremos las manifestaciones culturales y festivas en torno al corcho en la población, como son el día del Corpus Christi y el día de San Vicente Mártir.
En el espacio expositivo del ámbito del hogar y la economía familiar se muestran piezas de los usos del corcho de ayer y que en algunas ocasiones todavía se usan hoy. El corcho ha sido utilizado para fabricar piezas de uso cotidiano como las artesas de matanza, fiambreras, asientos, castillejos, etc.
A partir de aquí comienza el espacio que nos muestra en qué consiste la preparación y transformación del corcho, desde la explicación de la saca de corcho del alcornoque, pasando por la fábrica en la que se prepara el corcho, hasta la elaboración del tapón, los distintos tipos de tapones y sus usos para los diferentes vinos.
En la parte final del Museo, nos encontramos con una de las piezas más antiguas y singulares del mismo, se trata de la Máquina garlopa, que fue del primer tipo de máquinas que existió para fabricar tapones. Su origen se remonta al 1850, aunque ésta en concreto data de principios del siglo XX. Hoy en día ya no se utiliza, existe maquinaria muy moderna y efectiva para la fabricación de tapones.
Un Museo que organiza una serie de actividades relacionadas con este producto y otros talleres que no lo están tanto, pero que dinamiza la población.
