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Cancelado el proyecto de la mega presa que amenazaba con destruir el corazón de la Amazonia

Munduruku in the Tapajós river, next to Sawré Muybu Indigenous Land, home to the Munduruku people, Pará state, Brazil. Brazilian Government plans to build 43 dams in the Tapajós river basin. The largest planned dam, São Luiz do Tapajós, will impact the life of indigenous peoples and riverside communities. Mega-dams like these threaten the fragile biome of the Amazon, where rivers are fundamental to regeneration and distribution of plant species and the survival of local flora. Renewable energy, such as solar and wind, holds the key to Brazil’s energy future. Munduruku no Rio Tapajós, na região da Terra Indígena Sawré Muybu, do povo Munduruku, no Pará. O governo brasileiro planeja construir 43 hidrelétricas na bacia do Tapajós. A maior delas, São Luiz do Tapajós, terá impacto sobre a vida dos povos indígenas e comunidades ribeirinhas. Barragens como essas ameaçam o frágil bioma da Amazônia, onde os rios são fundamentais para a regeneração e distribuição de espécies vegetais e a sobrevivência da flora local. Energias renováveis, como solar e eólica, detêm a chave para o futuro energético do Brasil. Itaituba, Pará. 22/02/2016. Foto: Valdemir Cunha/Greenpeace.

La agencia brasileña ambiental, IBAMA, ha anunciado la cancelación del proceso para otorgar la licencia que permitiría construir la presa de São Luiz do Tapajós (SLT), el mega proyecto planificado para construirse en uno de los últimos ríos que siguen vírgenes en la Amazonia brasileña, el Tapajós. Sin esa licencia el proceso de aprobación para la presa no puede llevarse a cabo.

Esta decisión supone una gran victoria para Greenpeace y para los Mundurukú, una milenaria comunidad indígena que habita las orillas del Tapajós y que hubiera visto su hogar anegado por la gigantesca presa. La organización ambientalista y la comunidad indígena han estado años luchando juntos por esta causa.

Greenpeace, que ha estado luchando por esta causa junto a la comunidad indígena Mundurukú, celebra la victoria y pide la demarcación oficial de su territorio

Por ello Greenpeace aplaude la decisión del IBAMA y recuerda que además la presa hubiera causado daños irreversibles en el medio ambiente y en la singular biodiversidad de la zona, situada en el corazón de la Amazonia.

“Los Mundurukú estamos muy felices con esta noticia. Es algo muy importante para nosotros. Ahora seguiremos luchando contra otras presas en nuestro río”, ha declarado Arnaldo Kabá Mundurukú, jefe de la comunidad. Por su parte el responsable de campañas de Greenpeace Brasil, Danicley Aguiar, ha comentado que «ahora que la licencia ha sido cancelada, el Ministerio de Justicia brasileño debe dar el siguiente paso y reconocer oficialmente la demarcación del territorio de los Mundurukú, llamado Sawré Muybu». Y es que la comunidad quiere que se les reconozca oficialmente la dimensión de sus tierras y así puedan proteger su selva.

 

La presa iba a anegar territorios indígenas de la selva del tamaño de Nueva York.

 

En los últimos meses, más de 1,2 millones de personas en el mundo se han unido a los Mundurukú y a Greenpeace en su campaña para decir no a esta presa y pedir a multinacionales como Siemens, Mapfre e Iberdrola, involucradas en el proyecto, que lo abandonaran. Además, otras agencias brasileñas, como la FUNAI (Fundación Nacional Indígena) y los procuradores públicos del estado de Pará, recomendaron a la IBAMA que cancelara la licencia porque el proyecto desplazaría a una comunidad indígena, lo que sería inconstitucional en Brasil.

Hay 42 proyectos más de presas de este tipo proyectadas en la Amazonia que amenazan el pulmón del planeta

Pero la lucha no se queda aquí, además de la São Luiz do Tapajós, hay 42 proyectos más de hidropresas planificados en las inmediaciones del río Tapajós, en la Amazonia, como parte parte de un agresivo modelo económico que no tiene en cuenta la importancia de proteger la selva amazónica y a sus habitantes. Además ya se ha visto en mega presas anteriores construidas en la Amazonia los brutales impactos negativos que han tenido sobre las comunidades y el entorno y sus relaciones con escándalos de corrupción.

Por ello Greenpeace pide al Gobierno de Brasil que realice la demarcación oficial del territorio Mundurukú y que se enfoque en modos de energía realmente renovables y se convierta en un líder mundial en el terreno de la energía solar y eólica. Invirtiendo en sol y viento es posible generar la misma cantidad de energía que la que produciría una presa como la de SLT, por ello ahí está el futuro.

Más de un millón de personas en el mundo han firmado para que se parara el proyecto

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