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El sector del corcho avanza hacia una modernización del descorche

GO SUBER trabaja para mejorar la productividad del alcornocal español.

Muy pronto los propietarios de alcornocales dispondrán de datos que les permitan comparar la nueva subericultura con el sistema tradicional de descorche y saca con hacha.

El pasado día 21 de julio, organizada por COSE en la finca Dehesa Malduerme, cerca de Jerez de la Frontera (Cádiz) tuvo lugar una demostración del funcionamiento de las nuevas herramientas diseñadas en el proyecto GO SUBER para la modernización del descorche y la mejora de su productividad, cuyo objetivo final es alcanzar mayores rendimientos en el aprovechamiento sin dañar el árbol.

El proyecto está centrado en la mecanización y mejora de los procedimientos que están alrededor de la extracción del corcho. Incluyendo la recogida de datos para ayudar en la toma de decisiones, aumentar la seguridad y salud en el trabajo del descorche así como metodologías de clasificación, logística, venta y comercialización del corcho. “Se hace necesario definir las bases técnicas de una nueva subericultura apoyada en el poder de los datos y la digitalización para alcanzar mayor precisión en el alcornocal”, introdujo José Luis Becerra García, de la empresa JOGOSA.

“El hacha tradicional daña la capa madre del árbol -explicó Francisco Rubio, experimentado corchero extremeño-, mientras que la máquina eléctrica de rayado que se ha ensayado genera unos cortes rectos y limpios, sin tocar la capa madre y permitiendo un fácil descorche posterior. Los rendimientos de saca serán bastante mayores y las panas salen rectas, lo cual es fundamental para su posterior transformación en la industria corchera. Las nuevas tenazas, palancas y mijuros son herramientas menos peligrosas que el hacha. Además, las baterías de las herramientas eléctricas garantizan una autonomía de una jornada completa de trabajo”.

Tras un año completo de saca (un 2019 muy seco) y otro en curso (un espléndido 2020), el GO SUBER ya ha reunido sus primeros resultados de los ensayos de campo con los prototipos desarrollados, las herramientas auxiliares de extracción; las tenazas eléctricas y manuales y las palancas tecnológicas y mijuros, así como una escalera corchera para la seguridad en el trabajo de descorche.

“Se está trabajando sobre los procedimientos de cómo se realiza la extracción, cómo cambia la manera de extraer utilizando herramientas que no son las tradicionales (hacha) y, además, cómo se clasifica el corcho extraído, generando en conjunto lo que vendría a ser una nueva subericultura, tratando de llevar el monte alcornocal hacia una nueva explotación donde la extracción y la clasificación del corcho son más fáciles, seguras y precisas -explicó Manuel Bejarano,  de la empresa TREVINCA Inversiones Medioambientales-. Es muy probable que a muy corto plazo se empiece a utilizar en explotaciones estas herramientas de descorche y toma de datos, así como los sistemas de clasificación, en empresas que tienen contratadas sacas completas. Y esta campaña tendremos resultados que nos permitirán evaluar y comparar la saca tradicional con el nuevo método de mecanización y precisión”.

Para esta última fase de clasificación del corcho, la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Montes, Forestal y del Medio Natural de la UPM y el INIA han desarrollado una aplicación llamada CorkClass4.1, validada por este Grupo Operativo GOSUBER, que permite, introduciendo una serie de parámetros sobre muchas muestras de alcornoque, clasificar las partidas en porcentajes de corcho taponable y de refugo, o no taponable. Según Jorge Benito López, esta tecnología permitirá optimizar las calidades del corcho desde el propio monte.

Un primer análisis de los resultados obtenidos con las nuevas herramientas en la campaña de descorche anterior (2019) a cargo de Cristina Prades de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y de Montes de la UCO nos avanza que la productividad en términos de tiempo empleado en preparación y extracción del corcho como en las panas obtenidas se mejoran, si bien no requieren de la especialización de la mano de obra en el manejo del hacha. 

“Los principales beneficiarios de esta iniciativa son los propietarios de alcornocales, ya que podrán valorizar más y mejor el corcho y sus derivados, para optimizar su comercialización -concluyó Patricia Gómez Agrela, gerente de COSE, la Confederación de Organizaciones de Selvicultores de España-. Naturalmente, la tecnología que viene también contribuye a la rentabilidad y seguridad de las empresas de trabajos forestales y los propios sacadores”. 

Son socios del proyecto: La empresa Trevinca Inversiones Medioambientales(coordinadores) la empresa Coveless Ingeniería, la Confederación de Organizaciones de Selvicultores de España (COSE), el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria (INIA), la Agencia de Medio Ambiente y Agua de Andalucía (AMAYA), la Fundació Institut Català del Suro (FICSURO), la empresa JOGOSA Obras y Servicios y CICYTEX, a través del Instituto del Corcho, la Madera y el Carbón Vegetal.

Como socios subcontratados: el Consorci Forestal de Catalunya (CFC), la Asociación de Dehesas Ecológicas de la Provincia de Huelva (ADEHECO), la Asociación de Propietarios de Monte Alcornocal de Extremadura (APMAE), la Universidad de Córdoba (UCO) y la Fundación Conde del Valle de Salazar-ETSI Montes.

PROYECTO COFINANCIADO AL 80% POR EL FONDO FEADER CON UN MONTANTE TOTAL DE AYUDA DE 531.994,36 €