La justicia europea respaldó el pasado mes de mayo a Bruselas en uno de sus contenciosos con Polonia, al estimar que las talas en Bialowieza, uno de los últimos bosques vírgenes de Europa, son contrarias a la legislación europea sobre la protección de sitios protegidos.
Las “operaciones de gestión forestal activa” conducen a la “desaparición” de una parte de este sitio protegido en la UE, declarado Patrimonio Mundial de la Unesco, argumentó el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) en el fallo.
Polonia, en palabras del portavoz del ministerio de Medio Ambiente, Aleksander Brzozka, indicó que “acatará la decisión” del alto tribunal con sede en Luxemburgo y analizarán “cuidadosamente”.
En otra decisión previa al fallo final, el TJUE había amenazado en noviembre a Polonia con una multa de “al menos 100.000 euros diarios” si no detenía “inmediatamente” sus controvertidas medidas, salvo las destinadas a “garantizar la seguridad pública”.
Las ONGs ecologistas celebraron el fallo como “una victoria para todos los defensores del bosque de Bialowieza. Un sitio ancestral, único”, según James Thorton, de ClientEarth.
Ahora, Polonia debe cumplir con la decisión de la justicia. De no hacerlo, la Comisión puede llevarla de nuevo ante el alto tribunal por incumplir la sentencia para que decida si imponer la sanción económica.