La Feria Internacional de Turismo (FITUR), celebrada la pasada semana en IFEMA, evidenció la apuesta decidida de las comunidades autónomas por el turismo forestal. Una actividad con muchas posibilidades, que puede ejercer como elemento dinamizador de las zonas rurales.
El turismo forestal va más allá de lo que es un paseo por un monte, pues implica disfrutar de árboles singulares, palpar las actividades socio-culturales, disfrutar de la gastronomía local, así como conocer la vida de la población de estos territorios.
Uno de los ejemplos por la apuesta de ese turismo forestal y sostenible lo hizo patente Aragón, cuya promoción turística se hizo bajo el lema de “liderar el cambio turístico español hacia un turismo sostenible”. Y es que su stand, con una superficie de 503 metros cuadrados, daba especial importancia a la madera y los recursos forestales. Así, la madera de pino utilizada contaba con el sello que certifica su procedencia de bosques gestionados de forma sostenible.
Uno de los actos más importantes que se vivió en este stand fue la presentación del Día Internacional de los Bosques, que tendrá lugar el 20, 21 y 22 de marzo, en las localidades de Orihuela del Tremendal (Teruel) y Orea (Guadalajara). Una oportunidad única para la promoción de los recursos que ofrece los bosques y destacar la potencialidad del turismo forestal. «Se pondrá en valor el importante papel de los bosques en la lucha contra la despoblación, que en este caso se concreta en el potencial turístico que los Montes Universales, cuna del río Tajo, tienen para estas dos poblaciones», indicaron desde el stand aragonés.
Otro caso significativo de promoción de este turismo se pudo encontrar el en stand de Andalucía. Allí se dio especial importancia a sus recursos naturales y a su como un potencial para el desarrollo turístico.
Según los datos ofrecidos para demostrar la importancia del turismo forestal en la provincia de Córdoba, un total de 35.556 personas pasaron por los centros de visitantes de los espacios naturales protegidos de la provincia durante el pasado año. Los espacios más visitados fueron las Reservas Naturales de las Zonas Húmedas del Sur, con 7.174 personas, seguido del Parque de Cardeña-Montoro con 6.909 y el Parque de Hornachuelos, con 6.269. El Parque Natural Sierras Subbéticas acogió 5.604 visitantes y el Parque Periurbano Los Villares, 5.697.
Comunidades como Asturias, Navarra, El País Vasco, Extremadura, Canarias, Galicia o Castilla-La Mancha, tampoco desaprovecharon la ocasión y dedicaron un espacio importante de su estancia en FITUR a destacar sus recursos forestales y su importancia en el turismo. Un turismo de naturaleza cada vez más demandado.
GRANDES BENEFICIOS
El turismo forestal puede ofrecer grandes beneficios desde el punto de vista ambiental, social y económico. Desde el punto de vista ambiental resulta muy efectivo para contribuir a preservar el medio. De hecho, se están protegiendo especies y parajes en todo el mundo gracias a los ingresos que los turistas efectúan en estas zonas. En este aspecto hay que tener presente e intentar que esta actividad turística no provoque impactos ambientales negativos en la flora y fauna de la zona.
Desde el punto de vista social, el turismo forestal puede aportar muchos beneficios a la población local, tales como dinero, empleo, infraestructuras, nuevas actividades económicas, es decir, un desarrollo económico importante en la zona.
Desde el punto de vista económico, el turismo forestal es ya una fuente de ingresos importante en países como México, Perú, Argentina, Costa Rica o China, que ven en esta actividad una manera de conservar su naturaleza y al mismo tiempo obtener importantes recursos y beneficios. Un turismo que aún no se explota en gran medida en España pero que, poco a poco, está ganando más visitantes.