por

La nueva norma de Cadena de Custodia PEFC será más respetuosa con el medio ambiente

En pleno proceso de revisión, se proponen muchos cambios que harán que la certificación sea más eficiente en el uso de los recursos.

Con más de 20.000 empresas certificadas en todo el mundo, el sistema PEFC de Cadena de Custodia tiene un gran impacto en los procesos de gestión interna de numerosas empresas a lo largo de la cadena de valor de la madera. Por lo que es fundamental asegurarse de que la norma sea lo mejor posible, fácil de usar, que cumpla con las expectativas del cliente y que respete la integridad de los requisitos y el sistema.

Regularmente PEFC revisa todas sus normas para integrar las mejores prácticas, las lecciones aprendidas y las expectativas de los interesados. El proceso de revisión comenzó a mediados de 2016 por parte de un grupo de trabajo, que hasta ahora se ha reunido seis veces y ha desarrollado cinco borradores.

Antes de que comenzara la revisión, se realizó una consulta pública global en la que se pedía a las partes interesadas que presentaran sus comentarios sobre la norma actual de Cadena de Custodia PEFC. El objetivo fue identificar las áreas de mejora en términos de usabilidad y resultados, y dónde se necesita la adaptación para satisfacer las expectativas de los interesados y las realidades del mercado.

 

¿CUÁLES SON LOS CAMBIOS ESPERADOS?

Muchos de los cambios propuestos harán que la certificación de Cadena de Custodia PEFC sea más eficiente en el uso de los recursos y respetuosa con el medio ambiente, al tiempo que conserva la solidez del sistema. Por ejemplo, una opción será realizar auditorías internas remotas en la modalidad de certificación “multisite” (múltiples instalaciones) ya que reducirá los costes relacionados con los viajes y las emisiones de gases de efecto invernadero necesarios para realizar dichas auditorías.

Asimismo, permitirá que un mismo “grupo de producto” esté vinculado a más de una instalación (cross-site) del certificado “multisite”, lo que también ayudará a reducir la huella de carbono al disminuir el transporte de materiales entre las instalaciones.

Por otro lado, la reintroducción de una declaración y etiqueta para la materia prima «pura» que proviene solo de bosques certificados (no mezclada con materias primas procedentes de fuentes no certificadas) permitirá a los compradores de material certificado elegir materias que nunca se han mezclado con ningún material no certificado, y así comprar productos que se originen exclusivamente en bosques certificados. Esto ayudará a promover aún más el impacto positivo de la certificación forestal en el terreno.

Se espera que el borrador de la norma esté disponible para la consulta pública mundial a mediados de 2019.

Para ayudar a que la certificación sea más fácil de usar, se propone simplificar el registro asociado a proveedores certificados, eliminando el requisito de tener copia del certificado del proveedor, siendo la web de PEFC la fuente autorizada con respecto a la verificación del estado de certificado de un proveedor. Por otro lado, la validez de los créditos en el método crédito acumulado o de concentración de volumen será más larga, lo que significa que los créditos obtenidos serán válidos hasta 24 meses en lugar de los 12 meses actuales. Esto ayudará a las empresas con menor demanda de material certificado PEFC, dándoles más tiempo para aprovechar su material certificado.

Uno de los mayores retos es la expansión del Sistema de Diligencia Debida (DDS) de PEFC para cubrir los «valores esenciales de sostenibilidad». Esto elevará aún más los requisitos aplicables a la pequeña cantidad de material no certificado que se puede mezclar con material certificado, especialmente importante en países con débil legislación y/o aplicación de la ley.

Esta extensión del Sistema de Diligencia Debida a los «valores esenciales de sostenibilidad» fue decidida por la Junta de PEFC a finales de 2017. Dado que es un desafío desarrollarlo de una manera significativa y de sencilla aplicación, el proceso de revisión general está llevando más tiempo de lo esperado.

 

PRÓXIMOS PASOS

Se espera que el borrador de la norma esté disponible para la consulta pública mundial a mediados de 2019. La consulta pública es una parte esencial del proceso de establecimiento de normas de PEFC ya que es cuando se comparte el trabajo realizado por el Grupo de Trabajo con el resto del mundo para obtener la aportación de todos los interesados.

Es muy importante obtener comentarios y opiniones adicionales, por lo que desde PEFC se invita a todos los interesados a contribuir y compartir sus conocimientos. Todos aquellos que lo deseen pueden inscribirse al boletín de revisión de normas PEFC.

Las aportaciones de la consulta pública tendrán un impacto significativo en las próximas etapas. Si no son necesarios cambios importantes, la norma puede lograr la aprobación final por parte de la Asamblea General de PEFC para finales de 2019 o, si se requiere más trabajo probablemente se aprobaría en 2020.

 

¿QUÉ SIGNIFICARÁN ESTOS CAMBIOS PARA LAS EMPRESAS?

Una vez que se apruebe la norma revisada, habrá un periodo de transición de dos años, para que las empresas, los organismos de certificación y los organismos de acreditación tengan el tiempo suficiente para comprender e implementar los nuevos requisitos. Este período de transición se complementará con capacitación y seminarios web a nivel nacional e internacional.