MADERA SOSTENIBLE ha asistido al aserrado de dos trozas de Ciprés Español, de gran sección, en la empresa MADINTER, proveedora de madera para la fabricación de instrumentos musicales, con una sierra portátil LT10 de WOOD MIZER.
El Ciprés es una madera española, que MADINTER prepara para la fabricación de guitarra flamenca. Una madera nacional, para un producto nacional.
Las trozas de madera provenían de Jerez de la Frontera (Cádiz). El Ciprés es una especie muy protegida; hay muy pocos árboles que se puedan cortar. “Estos estaban en un jardín, y se iban a caer, porque estaban muy deteriorados –nos explica Jorge Simons, responsable de la fábrica de MADINTER en el municipio madrileño de Cerceda-. Sus propietarios pidieron permiso, y los cortaron. En principio la madera iba a ser destinada a piezas de torno, talla y artesanía, pero un guitarrero en la familia contactó con MADINTER, para ver si aquí podíamos hacer fondos y aros con ellos”.
Las trozas medían 77 y 84 centímetros de diámetro respectivamente. Hubo que cortar poquito a poco, quitando madera de los cuatro lados, para intentar alcanzar una sección que pudiese entrar en la máquina. “Estudiamos previamente la pieza, para tratar de extraer de ella el máximo provecho”, apunta Jorge Simons.
Finalizada la sesión de aserrío, se registró un rendimiento del 70% de la madera del tronco; de la cual será posible aprovechar finalmente un 45% de la misma, para poder fabricar aros y fondos para guitarras.
MADINTER ha elegido WOOD MIZER para preparar la madera que después, en el taller, será mecanizada y, finalmente, en casa de cada cliente, convertida en música.
“La elegimos por su versatilidad y portabilidad –nos cuenta el responsable de fabricación de MADINTER-. Es una máquina fácilmente manejable, que apenas ocupa espacio y sale a escena cuando necesitamos cortar madera”.
Los instrumentos musicales, y las guitarras en concreto, a menudo están hechos de maderas de muy alta densidad, como el cocobolo o el ziricote. Por ello, la LT10 de WOOD MIZER a veces corta con hojas de tungsteno madera de más de 1000 Kg / metro cúbico. “Son materiales muy exigentes para la máquina y sus sierras”, asegura Simons.
“Colocar la troza y dar el primer corte es más sencillo con la WOOD MIZER que en una sierra de cinta convencional –prosigue-. Logramos un corte fino gracias a las sierras de 1,035 milímetros, con lo cual apenas se desperdicia madera, que en nuestro caso es de altísimo valor”.
Por MADINTER pasan piezas de madera de especies cuyo valor alcanza los 60.000 € / metro cúbico. Y en ocasiones se aprovecha de una pieza menos del 20 por ciento. Es otro mundo.
CORTANDO MADERA
Sin electro válvulas, controles ni displays, y con repuestos tan sencillos como una correa, la sierra portátil de WOOD MIZER es realmente segura y fácil de usar, con un mantenimiento y limpieza muy simples. “Es una máquina de campo -bromea Jorge- mientras nos alcanza el agradable aroma del Ciprés, mientras es seccionado”.
Por eso esta magnífica sierra trabaja igual en Cerceda (Madrid), donde está ubicada la planta de producción de MADINTER, que en África, Estados Unidos, Brasil o la India. En el monte, en la parcela del campo o en el taller. Es un acierto.
El cliente valora y mucho el ahorro de energía que supone cortar con WOOD MIZER, en vez de en una sierra de cinta estacionaria. “Son consumos mínimos, ridículos, de gasoil o electricidad, comparado con los antiguos motores de 40 y 50 CV”, concluye el responsable de la fábrica de MADINTER.
“Cortamos madera puntualmente. Dependiendo de las necesidades que vayamos teniendo de materia prima. No podemos tronzar o seccionar un árbol, y no transformarlo entero, porque la madera se puede torcer, rajar, combar o doblar”.
Agrada a MADINTER la proximidad de HERSAN, el distribuidor de WOOD MIZER en la Península Ibérica, buen asesor y diligente servicio técnico para sus clientes. “Todas las necesidades están cubiertas”.
Fundada en 2001, MADINTER es una empresa española con sede en Cerceda, Madrid, que está especializada en el suministro de madera para la fabricación de instrumentos musicales.
La música es el mejor eco para su actividad y violines, guitarras y otros instrumentos de cuerda no podrían haberse construido sin las posibilidades que ofrecen las variedades de madera que MADINTER propone.