AEIM ha celebrado recientemente su Asamblea General con gran éxito de participación. ¿A qué retos se enfrenta el sector en 2023?
Sí. Estamos muy contentos con la gran participación en nuestra Asamblea General de empresas del sector de la madera y derivados de toda España. Sin duda, la fortaleza de nuestra organización es la implicación y el compromiso de las empresas asociadas. Creo que estamos en un momento crucial, muy prometedor para nuestro sector y es preciso unir fuerzas.
“El viento sopla a nuestro favor pero hay que saber desplegar las velas”. Se avecina una avalancha de normativa ambiental, sobre todo desde Europa, que nos puede favorecer si realmente estamos preparados para responder con eficacia, como sector unido. Un buen ejemplo de ello es el nuevo Reglamento Europeo contra la Deforestación que fue el tema de nuestra jornada previa, el 2 de marzo, a la que asistieron más de cien personas de la industria de la madera, administración, grupos conservacionistas, mundo académico y de la investigación, etc. Se puso de manifiesto la complejidad de cumplir con las exigencias de dicho reglamento, si bien con la seguridad de que el aprovechamiento de la madera de una gestión forestal sostenible nunca puede producir deforestación o degradación forestal.
¿Qué prioridades ha identificado AEIM para este año?
A comienzos del año pasado tuvimos una Junta directiva extraordinaria de planificación y discernimiento en la que identificamos algunas prioridades para nuestra organización. Hubo general acuerdo en que AEIM tenía que ser la organización referente del sector de la madera y derivados en España, ante la Administración (central, autonómica, regional), los medios de comunicación, grupos conservacionistas y la opinión pública en general. Al respecto, percibíamos claramente que teníamos que asumir la responsabilidad de liderar al sector y por ello decidimos incorporarnos a CEOE, para ser referente e interlocutor ante la Administración.
Esta decisión ha supuesto un gran esfuerzo por nuestra parte y diversas organizaciones del sector forestal y de la madera la han valorado muy positivamente. Nuestra pertenencia a CEOE está abierta a la participación de todas las organizaciones y empresas del sector de la madera y forestal, incluyendo el sector de la biomasa.
¿Entiende entonces AEIM que cada vez hay más relación entre el sector de la madera y el forestal? Siendo un sector tan diverso, ¿Cómo se pueden buscar sinergias entre todos los actores implicados?
Creemos que hay que afrontar una nueva etapa si queremos que el sector de la madera tenga el impulso y el crecimiento que debe tener en esta nueva era de la bioeconomía circular. Lo forestal, la madera y la bioenergía cada vez están más relacionados a nivel mundial. Y así vemos como la distinta evolución en la demanda en los diferentes sectores de la madera: construcción, carpintería, envase, embalaje, biomasa influye decisivamente en toda la cadena de valor, desde el bosque hasta el producto final.
En lo que respecta a la construcción, estamos viviendo una auténtica “revolución” de la madera como paradigma de la nueva construcción sostenible, baja en carbono y que contribuye a paliar el cambio climático. Pero en este campo resulta esencial la colaboración entre la industria y los institutos tecnológicos. La promoción de la madera se debe basar en datos científicos, que ya tenemos, pero que es preciso difundir y comunicar adecuadamente para que lleguen a los arquitectos, constructores, promotores y a la opinión publica en general.
Se nos presentan grandes oportunidades que no podemos dejar pasar. Esperamos la colaboración de todo el sector.
Gracias, Alberto Romero por esta entrevista.
Un placer como siempre atender a “Madera Sostenible”, un ejemplo y modelo, como medio, de integración del sector forestal y la industria de la madera.
