HÉLICE Cocinas es una empresa murciana nacida en 2005, pero que realmente atesora 70 años de actividad, ya que hereda el conocimiento y experiencia de Cocinas EMILIO, creada en 1949.
Desde que la familia Ibáñez decidiera introducir en el mercado los muebles generados mediante módulos, la tecnología y el diseño no han cesado de desarrollar las cocinas de esta histórica empresa afincada en Torre-Pacheco que hoy, bajo la dirección de los hermanos Emilio, Jose Antonio y Ginés, diseña y fabrica para el profesional del interiorismo y la arquitectura, y también para el carpintero, modelos clásicos, modernos (con su serie ‘Urbana’) e incluso minimalistas. Así como proyectos especiales y singulares, a medida.
Distingue al producto de HÉLICE una personalización extrema de la cocina, fruto de la exigencia del mercado. Lograda gracias a:
- La inversión continua en maquinaria de última generación
- Una paleta de 17 colores diferentes de interior
- Más de 200 acabados posibles en el exterior
- Gran diversidad de materiales: LPL, HPL, PET, chapa natural …
- 3 gamas de cajones (Hettich InnoTech Atira, Hettich AvanTech y Blum)
- Diversos interiores de gaveta: Cristal, madera, porcelánico …
- Más de 30 colecciones vigentes
Desde siempre, HÉLICE Cocinas ha apoyado su desarrollo y su crecimiento en la incorporación de maquinaria y software de última generación y la tecnología que va irrumpiendo en el sector de la madera y el mueble. “Es lo que te da la oportunidad de incorporar a lo muebles la variedad de componentes y materiales que existen en el mercado -señala Ginés Ibáñez, arquitecto, responsable del departamento de Imagen y Diseño en HÉLICE Cocinas-. Es en la capacidad de personalización donde nosotros nos distinguimos de los demás”.
HÉLICE Cocinas no tiene raíces en la artesanía. Al contrario, muy pronto optó por automatizar la producción. La familia Ibáñez siente auténtica pasión por las máquinas. Lo lleva en el ADN. “Pero siempre hemos querido prepararnos bien, antes de salir al mercado a competir…”.
APUESTA POR NANXING
En efecto, en HÉLICE Cocinas se mira al detalle cada equipo que se va a incorporar a las líneas de producción. Y NANXINIG, un fabricante chino de creciente prestigio en Europa, aunque todavía poco conocido en España, especializado en diseñar líneas automatizadas de producción, es desde hace tres años el gran protagonista en la planta de la empresa murciana. Con un nesting, un taladro a 6 caras, 4 canteadoras y una espigadora-clavijadora. Todas ellas máquinas automáticas, aptas para alta producción aunque también de gran flexibilidad.
“Estamos muy satisfechos con el rendimiento de las máquinas, y también con el servicio técnico que nos prestan desde NANXING Ibérica -afirma José Antonio Ibáñez, responsable de producción en HÉLICE Cocinas-. No somos marquistas; estamos apostando por NANXING principalmente porque las máquinas funcionan muy bien y responden correctamente a nuestras necesidades de fabricación”.
La capacidad de personalización que exige el mercado ha llevado a HÉLICE Cocinas a optar por maquinaria que le concede una alta flexibilidad, cambios rápidos y sencillos en su configuración, siguiendo las instrucciones que llegan desde la oficina técnica, donde trabajan con el software de ARDIS. Y sin depender de terceros.
“Estamos encantados -concluye la familia Ibáñez-. No sentimos ningún ‘complejo’ por que nuestras máquinas no sean italianas o alemanas. Tenemos buenas máquinas, que funcionan muy bien. Que se fabrican en China, en NANXING; una de las actuales firmas líderes en la fabricación de maquinaria para la madera y materiales derivados de la madera”.
HÉLICE Cocinas posee 4 canteadoras NANXING; dos de ellas especiales para pieza estrecha (capaces de cantear en testa 5 centímetros, sin que la pieza se mueva), y otras dos normales, para cuatro cantos. En 2024 se proponen incorporar nuevos modelos, específicos para poder cantear a 45º y también formas y perfiles especiales. Con una relación calidad-precio muy interesante.
Además, la prestigiosa firma murciana tiene un nesting con carga, descarga y etiquetadora automáticas, que trabaja a 100 m/min. Incorpora siete zonas de vacío y un grupo de taladro. Aunque la emplean básicamente para cortar las piezas de los muebles.
Para mecanizar, tienen un CNC para 6 caras, con doble grupo superior, sin cambio de herramienta, más un grupo inferior.
Todo totalmente automatizado, todas las máquinas interconectadas. De forma que el operario, cuando acaba el trabajo, traslada a la oficina técnica información de cómo marcha el proceso de fabricación que está llevando a cabo.
