MOKOBA fabrica desde hace más de 20 años mobiliario de cocina y baño, y también armarios empotrados a medida. Hace un año compró a MAESMA una encoladora de cantos HEBROCK mod. F4, con la que consigue un acabado formidable, que el cliente ha notado y agradece.
Dirigida por los socios Carmelo Cosgaya y Manuel Ducid, esta empresa originaria de Begoña, y actualmente ubicada en el polígono Sangroniz, en Sondika, elabora mobiliario a medida para particulares y tiendas de Vizcaya. Con los materiales y componentes que desea el cliente, respondiendo al mercado. “El trabajo a medida y la calidad en los acabados es lo que nos defiende y diferencia de los centros de bricolaje y grandes superficies de mueble”, afirman.
Absolutamente precisa desde el primer dia, los socios de MOKOBA solo se preocupan de realizar una sencilla limpieza periódica del calderín, cada cinco o seis meses, vertiendo en él un líquido que sirve para retirar la cola sobrante, dejando el dispositivo como nuevo.
“De todas las que hemos tenido, reconozco que la HEBROCK es la mejor encoladora de cantos -asegura Manuel Ducid-. Es pequeña y sencilla, pero lo preferimos. Arranca enseguida, trabaja a una velocidad que nos va bien y prescinde de electrónica, que en esta máquina está de más”.
Tupí de estrada y grupo retestador a la salida dejan un canteado perfecto en cada pieza. Los tableros salen, y no hay que repasarlos. “Estamos muy satisfechos con el asesoramiento de MAESMA -afirma Carmelo Cosgaya-. La encoladora de cantos es una máquina muy delicada, y con HEBROCK hemos dejado de padecer, para disfrutar canteando nuestros muebles. Los clientes perciben y valoran el espléndido acabado de cada tablero”.
