Paco Chust, propietario y gerente de MASARMARIO y MINO COCINAS, tiene un alma industrial, no un alma artesanal. Hereda el carácter emprendedor y empresarial de sus padres. “Me gustan las máquinas, me gusta la productividad”, asegura el joven empresario valenciano.
Ligado al sector de la madera, por vía materna, inicia su actividad fabricando armario a medida empotrado; rellenando cualquier espacio con la solución que el cliente necesitaba, desde los zapatos a una cajonera, pasando por una caja fuerte.
Pronto captó que su cliente realmente era el prescriptor quien, además de un armario, le pediría muchas más cosas para completar un proyecto de contract, retail o interiorismo.
Sin dejar nunca el armario, como semilla del negocio, la empresa fue entrando poco a poco en el mundo de la cocina. Y crea sendos nombres comerciales para sus líneas de producto: MASARMARIO y MINO COCINAS. A todo ello se suma SPLASS, una nueva empresa distribuidora de los paneles de SONAE ARAUCO, con más de 50 diseños en stock.
Fabricación de muebles y distribución de tablero, entero o mecanizado, dirigida a fabricantes de mobiliario, prescripción de contract e incluso fabricantes de arquitectura efímera, son los negocios actuales de la empresa levantina.
“A mí me gustan los productos de calidad, y para mi empresa pienso igual -afirma Paco Chus-. Confío en que mis productos reflejan, de alguna manera, mi personalidad”.
En efecto, los muebles y armarios van equipados con materiales, herrajes y componentes de alta calidad. Los detalles se cuidan al máximo, mirando siempre al mercado e impregnando el producto con la experiencia y el conocimiento adquiridos. “En ocasiones intentamos romper. Por ejemplo, introdujimos tableros con textura de piel de los armarios y a continuación lo aplicamos en las cocinas, obteniendo una muy buena aceptación. Ahora vamos a probar con otra textura, efecto fieltro, que no es algo habitual. Son cosas diferentes, pero que tienen sentido”.
“Traslado al diseño de mis productos el valor añadido que obtengo con la capacidad de mi software -afirma Paco Chus-. Para que mis clientes, a su vez, aporten valor añadido en la venta del producto. Configurando y generando soluciones para ellos, con medios industriales. Esta potencialidad nos aleja de la competencia, es un resquicio para diferenciarnos”.
APUESTA POR PANOTEC
“Hace muchos años que deseaba tener una PANOTEC -afirma rotundo Paco Chust-. Numerosos colegas y amigos no comprenden cómo una empresa del tamaño de MASARMARIO y MINO COCINAS ha podido invertir en una máquina como ésta. Y yo creo que la PANOTEC va a ser un resorte de crecimiento de mi empresa. Es lo que servirá para que lo que yo hago se convierta en un producto de verdad”.
PANOTEC permite una flexibilidad total y absoluta al embalar, cien por cien respetuosa con el medio ambiente. Es una máquina súper fácil de usar y de mantener. Que incluso desvela el precio de cada caja.
“Soy amante de la experiencia del usuario -prosigue el empresario levantino-. Y en esta experiencia juega un papel muy importante el packaging. El producto tiene que estar bien embalado, bien protegido. Y tiene que tener una buena imagen. Con la PANOTEC consigo todo esto”.
Según Paco Chust, “los técnicos que instalaron la máquina merecen un diez: GAOR ™ tiene muy bien cuidado el proceso de cómo debe de hacerse la instalación de una máquina en un cliente. El técnico no se marcha hasta que verifica que todo funciona correctamente. PANOTEC permite una flexibilidad total y absoluta al embalar”.