José Manuel Iglesias es fundador de GALOPIN, empresa que nació de una pequeña carpintería y que recoge la tradición de su padre, carpintero de profesión. Iglesias todavía exhibe con orgullo las máquinas de su padre, con las que elaboró sus primeros productos.
Entiende José Manuel Iglesias que la empresa tiene una importante función social. No sólo en lo que respecta a ser generadora de riqueza, sino como germen o sustrato para la innovación y la plasmación o potenciación de tendencias sociales. La empresa es para él un instrumento para detectar lo que ocurre en la sociedad, un sensor y un altavoz, al mismo tiempo que lanza propuestas. Esto obliga a la empresa a ser enormemente sensible a lo que ocurre en su entorno inmediato y a lo que hoy, debido a la velocidad que aportan las nuevas tecnologías en las relaciones humanas, puedan suponer cambios de tendencia o formas de interpretar las diferentes culturas o mercados.
En 2015 finalizan numerosos proyectos del Plan Estratégico AVANT, emprendido por el CMA en 2012. ¿Cuáles van a ser los resultados y conclusiones principales? ¿Cuánto y de qué forma va a beneficiar este conjunto de acciones a las empresas Asociadas al Cluster?
El balance del Plan Estratégico AVANT, a pesar de la coyuntura económica general de los últimos años, ha sido positivo. En estos años en los que la economía se ha visto resentida, desde la Dirección del Cluster da Madeira de Galicia (CMA) hemos organizado acciones que supusieran un valor añadido para las empresas, agudizando el ingenio con nuevas propuestas y estableciendo nuevas colaboraciones. Así, desde hace años mantenemos una colaboración activa y estrecha con el CIS Madeira, el Colexio Oficial de Arquitectos de Galicia, la Escuela de Arquitectura de A Coruña, el Consorcio de Santiago o la Fundación Juana de Vega, entre otros, lo que nos permite compartir sinergias y sacar adelante proyectos de interés para todos.
Durante estos años venimos realizando una importante labor con el prescriptor, con el objetivo de caminar de la mano con ellos, a través de objetivos comunes. Además, se ha realizado un especial esfuerzo en la internacionalización del Cluster y de sus empresas asociadas; las miras están puestas más que nunca en Europa, a través del Consorcio Europeo de Clusters constituido recientemente. El reconocimiento europeo que se ha obtenido con la Gold Label a la Excelencia en la Gestión nos ha abierto muchas puertas en este sentido.
Además, no hemos descuidado aspectos tan importantes para el CMA de manera histórica como son la formación directiva de nuestros asociados o la puesta en marcha de proyectos de innovación, entre otros.
«Venimos realizando una importante labor con el prescriptor, con el objetivo de caminar de la mano con ellos»
Las empresas del cluster han tenido acceso a proyectos de primer nivel. De alguna manera el cluster ha generado una economía de escala que permitió a los socios acceder a recursos que a una empresa pequeña le resultan imposibles. Como socio del cluster, creo que se ha creado escuela, ha sido como el tránsito por la universidad. Nos ha servido para conocer herramientas y conocimientos que ni siquiera sabíamos que existían. Otro punto importante es el networking. Los empresarios preferimos los consejos de nuestros colegas y, si a uno le ha ido bien, entendemos que puede valernos a nosotros. El debate interno de los proyectos en ese sentido ha sido muy clarificador y motivador.
Las prioridades del CMA de cara al futuro: Monte, Aserrío, Energía, Arquitectura… ¿Hacia dónde se dirige la política de acción y promoción del Cluster de cara al futuro?
En el cluster tenemos que entender todas las sensibilidades generando empatía entre toda la cadena de valor. Primero tenemos que entender muy bien todas las fases del proceso y finalmente generar confianza para que todos los protagonistas ejerzan su rol con responsabilidad y lealtad. Ahora lo vamos a intentar ver desde todos los focos, de arriba abajo, del monte al prescriptor y desde éste, desde el mercado al plantón que se ha de talar dentro de unos lustros.
Estrechamente ligados al CIS Madeira y a la Universidad de Vigo… ¿qué nos puede decir sobre los logros y objetivos del Cluster en materia de investigación, divulgación y formación sobre la madera?
Tenemos mucha ilusión en que al ampliar los puntos de vista, podamos afinar mucho mejor la innovación para que esté alineada con el mercado. Postulamos que las empresas que están en el ámbito del diseño deben hacer de Cool Hunters de toda la cadena de valor. En lo que respecta a la defensa de la cultura de la madera, creemos que a nivel global el mundo se empieza a concienciar sobre la necesidad de hacer una apuesta por materiales sostenibles y sanos para las personas y el planeta. Desde la constitución del cluster, llevamos postulando que la madera encarna perfectamente esa tendencia, esa nueva conciencia y lo es, por capturar y almacenar CO2, por necesitar poca energía para su transformación, por tener propiedades aislantes portentosas, por provenir de una gestión sostenible del bosque que tiene otras derivadas como la distribución y el asentamiento poblacional, el reparto de riqueza, el efecto positivo sobre la salud como defiende la teoría de la biofilia. La afectación al planeta empieza a ser tan grave que ella misma genera concienciación y ésta se plasma en jurisprudencia de los países más sensibles. Incluso ha pasado a ser la preocupación fundamental de países que hasta hace poco tenían una visón puramente productivista.
La madera es el material perfecto para protagonizar esa nueva etapa. Podríamos decir que volvemos al monte por necesidad. Allí están muchas líneas sociopolíticas de trabajo que van a obligar a repensar las directrices de los gobiernos de las grandes potencias y detrás irán todos los demás. La apuesta por el ecodiseño, la formación tanto para los prescriptores como la de los profesionales, la recuperación de técnicas tradicionales perdidas, nuevas especies de alto rendimiento y baja afectación medioambiental, la hibridación con nuevos materiales y tecnologías están abriendo líneas de investigación muy emocionantes que auguran un futuro muy prometedor para la madera y todas las actividades relacionadas con este material.
«La sociedad ha sido muy consciente de la importancia en el empleo del sector de la madera»
Tras casi 15 años de actividad, ¿se puede aseverar que el CMA ha servido para acercar las empresas del sector a otras entidades y profesionales afines al sector? ¿Ha servido el CMA para que la sociedad gallega y española perciba y sea consciente de la importancia de las actividades ligadas a la madera?
Creemos que la sociedad ha sido muy consciente de la importancia en el empleo del sector de la madera, aunque es necesario recordar algún dato relevante como que nuestro sector genera más empleo que la industria del automóvil. Si acaso creo que el sector de la madera se ha asociado a una reminiscencia de lo tradicional, arcaico y poco evolucionado. Incluso había una percepción de que se había perdido oficio y amor por las cosas bien hechas a cambio de la productividad pura y dura. Creo que el Cluster ha sido determinante a la hora de transmitir una imagen más cercana a la realidad. El mejor ejemplo son las empresas que lo integran, su vocación por la profesionalización, por la investigación, por la cooperación, y la búsqueda de la excelencia.
Carpintería y Mueble son los segmentos más representativos en el Cluster. ¿Cómo han sobrellevado estos subsectores gallegos la crisis económica y qué futuro les augura? ¿De qué manera y en qué medida ha influido el Cluster en su modernización y evolución?
No es ninguna novedad reconocer que la crisis ha sido devastadora para el sector y que una causa fundamental de que el impacto no fuera mayor, ha sido la determinación de las empresas familiares, de los empresarios que han tenido una actitud heroica sacrificando todos sus recursos y su ilusión en superar la mayor crisis de la historia contemporánea y en un contexto de la construcción que nos permite decir que nuestro sector estaba enclavada en la zona cero de la crisis.
Dentro del cluster tenemos los mejores ejemplos de las empresas de nuestro tejido empresarial con afán de superación. Creo que lo mejor, lo más destacable de mi paso como socio del cluster ha sido la cohesión que hemos vivido dentro. El sentimiento ejemplarizante y de pertenencia que sentimos entre nosotros. Yo he aprendido mucho de los socios con los que he compartido responsabilidades en el cluster. Podría decir que ellos han sido mis mejores maestros, que me siento muy orgulloso de sentirme su amigo y que me felicito por haber tomado la decisión hace años de incorporarme a formar parte de este colectivo.
En base a ese sentimiento que ha servido de argamasa para nosotros, dentro del cluster hemos adquirido nuevas herramientas y formas de pensar y afrontar los problemas. Cuando dudo de nuestros avances, recomiendo que echemos la vista atrás, que releamos los viejos informes. Nosotros le debemos mucho al cluster. De alguna manera nos ha servido como consejero y tutor de una transformación de entidad artesanal basada en la adhocracia, a una organización con objetivos y horizontes puestos en la globalización.
¿Cómo describiría Vd. la situación del sector gallego forestal y de primera transformación? ¿Casan y confluyen los intereses de propietarios forestales, rematantes y aserradores y fabricantes de chapa y tablero? ¿Hacia dónde se dirige este colectivo en el mercado? ¿Valora la sociedad gallega su pequeña propiedad en el monte? ¿Hay espacio suficiente para biomasa y para tablero?
Hay muchísimo que hacer en este campo. El problema de la pequeña propiedad emana de un modelo que fue exitoso en su momento, es el resultado de una cultura, de una reminiscencia antropológica que requiere generaciones para que se aprecien cambios. Hace décadas la propiedad significaba reputación y garantizaba la subsistencia. Ahora vemos como la gente renuncia a las herencias o como hay miles de fincas con propietario desconocido. La polarización que generan las ciudades atrayendo población está acelerando ese proceso, pero el agrupamiento de tierras es una condición sine qua non. Es necesario tomar decisiones menos tímidas y más consensuadas a las anteriores. Los diferentes partidos que se alternan en el poder deben tener amplitud de miras y pensar en el bien común y no tanto en el rédito electoral cortoplacista.
La función fundamental del cluster es coordinar para fomentar la cooperación
Para terminar, ¿cuáles son sus objetivos prioritarios y de actuación inmediata desde la junta directiva del Cluster hacia sus Asociados y hacia el sector y todos sus actores?
Generar vías de comunicación, fomentar la empatía y la asertividad. La función fundamental del cluster es coordinar para fomentar la cooperación. Para fomentar ese entendimiento queremos que se conozcan los diferentes puntos de vista, que la foto sea más rica, variada y diversa sin perder por ello organización y metodología. Pongo por ejemplo el diseño para explicar cuál sería esta reinterpretación de la cadena de valor. El diseño de verdad no sólo es una imagen bonita que cuida sólo la estética o algo que tenemos para enseñar a las visitas. El diseño de verdad piensa en facilitar la producción, la ejecución del producto, la logística, en cumplir normativa, en que el material sea duradero, sostenible, que facilite su mantenimiento que sea coherente en definitiva con el discurso y la eficiencia. El diseño va de abajo arriba y a la inversa. Para nosotros el recurso es fundamental, no solo es una oportunidad, sino que modula nuestra cultura, nuestro argumentario diferenciador para hacernos ver en un mundo globalizado y altamente competitivo.
Eso queremos concretarlo en líneas de trabajo muy definidas en donde como ejemplo paradigmático participe una representación de toda la cadena de valor. Para regular cada protagonismo y el rol de cada parte, queremos inspirarnos en la forma de operar de otros entornos donde hay más tradición y adaptarlo a nuestra idiosincrasia. Sinceramente veo una excelente disposición en las empresas del cluster para abordar esta reinterpretación de la labor que ya estábamos haciendo desde hacía años y – que todo hay que decirlo- es la que nos ha traído hasta aquí.