Los servicios técnicos de la Federación Española de Pavimentos de Madera, junto con Gonzalo Medina, secretario de los comités técnicos de normalización 008 y 009 de AENOR y responsable del área de normalización en AITIM (Asociación de Investigación Técnica de las Industrias de la Madera), llevan a cabo actualmente la revisión de la norma sobre instalación de parquet (UNE 56810).
La XX Convención de la FEPM, celebrada los pasados días 12 y 13 de junio en Girona, fue el escenario elegido para presentar a los profesionales de la fabricación, distribución e instalación de pavimentos de madera los avances logrados en la citada revisión de la Norma UNE 56810; un trabajo para el cual la Federación cuenta con las sugerencias y opiniones de todos sus Asociados, con la finalidad de alcanzar una actualización de la norma lo más cercana y fiel posible a la realidad de la instalación del parquet.
La Norma UNE 56810
La Norma UNE 56810 sobre instalación de parquet es una referencia en el sector del pavimento de madera. Tanto para los propios instaladores, como para los profesionales que se mueven alrededor del mundo del parquet: peritos, direcciones facultativas, direcciones de obra, promotoras, etc. Revisada múltiples veces, es uno de los documentos normativos más activos, consultados y más vendidos en el espectro de la industria de la madera.
Las líneas generales de la revisión
Se ha reforzado en todo el texto de la Norma el carácter «obligatorio». Por ejemplo, se han sustituido expresiones como «se recomienda» o «se debería» por otras como «se hará», «se realizará» o «se deberá».
De igual manera, se ha sustituido en el texto el término «recomendación» por el de «especificación». Muchas notas de la versión anterior pasan ahora a ser texto normativo.
«Todo ello se debe a que aquellas ambigüedades eran tomadas por jueces, prescriptores y otros profesionales de una forma muy laxa, lo cual repercutía normalmente de forma negativa a los instaladores de parquet», comenta Gonzalo Medina.
A todo ello se suman nuevas especificaciones y oportunos cambios redaccionales, que sirven para actualizar el sentido y alcance de la normativa.
Los principales cambios
En lo sucesivo, al abordar la Norma 56810 hará referencia a las Normas EN 13813 (sobre soleras de anhidrita) y EN 14342 (Norma armonizada del Marcado CE del parquet).
Asimismo, las resinas sintéticas y otros morteros irrumpen en el nuevo texto como alternativa al plástico como barrera de vapor.
Respecto a las condiciones ambientales de una obra, la Norma anterior marcaba unas condiciones de humedad y temperatura a tener en cuenta antes de iniciar los trabajos de instalación. Ahora se ha añadido una coletilla que aumenta la duración en el tiempo de esas condiciones en al menos siete días a partir del comienzo de la obra. «Si es necesario acondicionar la obra para obtener el entorno adecuado, procede evitar aquellos factores que contribuyen a resecar el ambiente, tales como los cañones de calor», explica Gonzalo Medina.
Las soleras
El soporte habitual para la colocación de parquet es la solera de mortero de cemento, tal como aún refleja la propia Norma UNE 56810. «Seguramente, esto sigue siendo así en la realidad, pero no es lógico que la Norma lo exprese en su texto, ya que existen otros tipos de soleras», afirma Gonzalo Medina. Por ello, ese párrafo se ha retirado en la revisión de la Norma.
Y se incorpora a este capítulo la solera de anhidrita, antes citada, así como una resistencia a la compresión para todas las soleras de 20 N/mm2 (200 Kg/cm2), y un grosor mínimo de 5 cm. para un mortero estándar (antes era de 3 cm). Asimismo, se alude a los productos cementicios de secado rápido, indicando que dichos tiempos de secado no deben ser inferiores a lo que marca la Norma.
En cuanto al control de la solera, cobran validez las fotografías realizadas en obra de los diferentes grados de humedad allí registrados.
Los otros tipos de soportes
La tipología de soporte en la instalación de un parquet es uno de los capítulos que más modificaciones ha sufrido en la revisión de la Norma UNE 56810.
En los soportes a base de productos aligerantes (mezclas de morteros con arlita o vermiculita) se llama la atención sobre el hecho de que «todos estos productos porosos absorben la humedad de los morteros, con la particularidad de que después la evacúan muy lentamente, provocando problemas a posteriori», explica Gonzalo Medina.
La Norma no es tan drástica al desaconsejar la colocación de parquet sobre pavimentos textiles preexistentes pero, en general, por cuestiones de salubridad y también de funcionalidad del nuevo pavimento, tampoco se recomienda, aunque se realice una limpieza profunda de la moqueta. En principio, la Norma aconseja retirarla, y acondicionar el nuevo soporte.
Al igual que en la versión anterior, se continúa considerando a los soportes cerámicos y pétreos como perfectamente válidos para la colocación de parquet; aunque se advierte igualmente de la importancia de estudiar la forma de evacuación de humedad preexistente y se aconseja realizar pruebas previas de adherencia del parquet al soporte.
Recepción y acopio de materiales en obra
Como novedad, la Norma informa acerca de la documentación del parquet que exige el Código Técnico de la Edificación:
• Fichas técnicas
• Instrucciones de instalación
• Instrucciones de mantenimiento y conservación
• Certificado de garantía (coberturas y exenciones)
• Declaración de prestaciones CE (ya obligatoria para todo tipo de parquet)
Así como de los productos auxiliares (barnices, adhesivos, etc.):
• Fichas técnicas
• Fichas de seguridad
Sistemas de colocación
En este capítulo y para los tres sistemas de colocación (pegado, flotante y entarimado), no hay grandes variaciones en la revisión de la Norma 56810.
A la hora de colocar parquet sobre sistemas radiantes de calefacción y refrigeración, la FEPM considera que la Norma debe cubrir adecuadamente este segmento cada día más demandado por los prescriptores.
Se excluyen expresamente los sistemas secos o de folio, hilo o placa radiante, «porque se ha constatado que, aunque no siempre, producen una mala difusión del calor y, en general, son problemáticos», advierte Gonzalo Medina.
Queda reforzada en la Norma revisada la colocación encolada, para los tres sistemas de colocación. «El sistema que mejor recibe y transmite el calor es la colocación encolada», expresa la Norma.
De igual manera, se ha retirado un párrafo del texto anterior que aludía a las maderas nerviosas, «porque este término es ambiguo en sí mismo». Y como se dijo anteriormente, se incorporan las soleras de anhidrita, con su correspondiente porcentaje de humedad (0,5%), aconsejable para esta aplicación en particular.
En el caso de que se aplique el protocolo de secado de la solera con el propio sistema de calefacción radiante, la Norma aconseja «iniciar los trabajos de pegado inmediatamente después del enfriamiento».
Los métodos de medición de la humedad en las soleras en las instalaciones de parquet sobre sistemas radiantes de calefacción y refrigeración son ciertamente delicados; en particular los eléctricos, ya que hay que pinchar sobre la superficie. En este sentido, la Norma aconseja pinchar testigos y recomienda que las mediciones se realicen con el higrómetro CM, esto es, que no se hagan con el higrómetro de resistencia.
Protección, mantenimiento e inspección
Con el objetivo de reducir costes y responsabilidad al instalador del parquet, la FEPM sugiere introducir varios cambios en el apartado de la Norma UNE 56810 que se refiere a los aspectos de protección, mantenimiento e inspección de la obra realizada.
Antiguamente, una vez realizados los trabajos de colocación, había que proteger provisionalmente el parquet con cartones u otro material poroso, hasta la entrega de la obra. La revisión de la Norma propone que esa protección provisional corra ahora a cargo del «poseedor» de la vivienda o local.
En la inspección para la recepción, se ha introducido un carácter imperativo en todas las actuaciones, es decir, ya no se aconseja, sino que se obliga a ello.
A la entrega de los trabajos, se incluye la firma de un documento de recepción que debería de ser firmado, si esa recepción es conforme, tanto por el instalador como por el responsable de la obra.
Finalmente, donde antes se aludía en la Norma a unas instrucciones de mantenimiento, ahora de indica la obligatoriedad de entregar al cliente un «Manual de Mantenimiento y Conservación» del pavimento instalado.
Todas las cuestiones referidas están incorporadas a la Norma y enviadas a Aenor, aunque todavía en fase de información pública y, por lo tanto, abiertas a debate y discusión. Es por ello que la FEPM agradece a sus Asociados la aportación de opiniones, críticas y comentarios al respecto, con el fin de concluir en una nueva Norma actualizada, práctica y válida para afrontar el presente y el futuro de la instalación de pavimentos de madera.