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MADERA, VINO = CEDRIA

La historia recuerda la perfecta unión entre la madera y el vino.

Desde las portaderas y las cajas de las antiguas prensas, los toneles para la elaboración y el transporte, el envigado de las bodegas y los modernos techos de preciosas y elegantes maderas, ésta ha aportado al vino, singularidad, riqueza aromática, estabilidad y armonía, durante su crianza.

En ocasiones, algún vino se ha visto contaminado por haloanisoles, los cuales no siempre provienen del tapón de corcho, sino que a veces su origen se sitúa en las maderas utilizadas en la construcción de las bodegas. Tratamientos realizados con clorofenoles o bromofenoles, con el objetivo de preservar la madera, han generado en poco tiempo, debido a la actividad fúngica habitual en las bodegas, que si por alguna circunstancia han alcanzado el vino, éste queda irremisiblemente afectado en su olor y gusto, provocando el rechazo del consumidor. CEDRIA, conocedora de este problema, fabrica todos sus productos EXENTOS de contaminantes. De este modo, se puede proteger y mantener la madera con garantía total.

El producto CEDRIA DEKOR LASUR contiene como principio activo antifúngico una mezcla de 2-octil- 2H-isotiazol-3-ona (OIT) y propinil butilcarbamato (IPBC) muy efectiva contra los mohos, hongos y levaduras que deterioran la madera. No contiene ni metales pesados, ni aldehídos, ni halofenoles.

Si además de la protección frente a hongos, se precisa también protección frente a insectos xilófagos, el producto CEDRIA LASUR PLUS DEK, inscrito en la Dirección General de Salud Pública con el número 10-80-03783, contiene Propiconazol como producto activo fungicida y Permetrina como insecticida. EN los últimos años, se ha podido detectar en muchas bodegas la presencia de cloroanisoles que, si accidentalmente entran en contacto con el vino, lo contamina irremediablemente. Entre ellos, el más importante es el 2,4,6-tricloroanisol (TCA), si bien otras moléculas cloradas (2,3,4,6- tetracoloroanisol, pentacloroanisol, etc.) también lo pueden contaminar. Más recientemente, se detectó también la presencia de TBA (Tribromoanisiol) de percepción sensorial parecida al TCA.

La degradación del Propiconazol conduce al 1,2,4-triazol que no es precursor del 2,4,6- tricloroanisol. Ambos biocidas están libres de cloro fenoles, aldehídos y metales pesados, por lo que pueden ser utilizados en las bodegas con toda garantía y seguridad.

Tanto CEDRIA DEKOR LASUR como CEDRIA LASUR PLUS DEK son productos al agua, respetuosos con el medioambiente y cumplen la normativa sobre compuestos orgánicos volátiles. Las más importantes bodegas, protegen sus bellas estructuras de madera decorativa o estructural con Lasures CEDRIA. De este modo, madera y vino pueden seguir coexistiendo, compartiendo espacios, ennobleciendo las bodegas y enriqueciendo el vino.