Estas ventanas se han fabricado en madera de pino silvestre laminado y se han barnizado en tono nogal. La madera utilizada procede de bosques con gestión sostenible, y los barnices utilizados son en base agua, por lo que la actuación ha sido muy respetuosa con el medio ambiente.
Los trabajos de sustitución han consistido en la eliminación de las hojas de las ventanas antiguas y la colocación posterior de las ventanas de CARINBISA, respetando en cada caso las características constructivas de las piezas originales, manteniendo las formas curvas y la distribución de los cristales.
Además, esta sustitución de ventanas en el Ayuntamiento de Lleida, ha ayudado y ayudará a una reducción importante en la emisiones de CO2. Por un lado tenemos el ahorro energético durante la fase de uso de la ventana, ya que las ventanas de madera tienen los mínimos valores de transmisión térmica por estar fabricadas con material aislante por naturaleza y, por otro lado, como los bosques son un sumidero de carbono, durante el proceso de fabricación la ventana de madera tiene una huella de carbono negativa. Este dato es muy importante porque al analizar el ciclo completo (fabricación + tiempo de vida), de la ventana nos encontramos que las emisiones globales para una ventana de madera son entre 3 y 15 veces menores que para las de cualquier otro material.
Por lo que la ventana CARINBISA es ideal contra el cambio climático.
De este modo en el Ayuntamiento de Lleida se ha ejecutado una buena acción de rehabilitación, mejorando considerablemente la habitabilidad del edificio de una forma perfectamente respetuosa con el medio ambiente.