Heredero de una tradición familiar, empresarial y carpintera, Paco Chust emprende su propio camino en 2012. E inmediatamente lo liga con la digitalización, donde contempla muchas posibilidades para desarrollar su primer negocio de fabricación de armarios a medida. Pronto conecta con PROSOLID 3D, a quien compra un paquete informático que incluye TOPSOLID, para diseñar, y ARDIS, para gestionar la fabricación.
El objetivo: Dibujar en una plataforma en CAD y obtener la trazabilidad del diseño y de todas las piezas; etiquetadas e identificadas, lanzando su empresa hacia una Industria 4.0
“En menos de tres meses tuve la solución implementada -rememora Paco Chust-. Integrar TOPSOLID nos costó algo de tiempo. Implica formación y abrir la mente, para cambiar tu forma de hacer las cosas. Da la sensación de que nunca acabas; lo que sucede es que no paras de aprender. Con ARDIS, al contrario, tienes en 48 horas un retorno de la inversión y de inmediato funciona a la perfección. En mi empresa nadie concibe ya trabajar sin ARDIS”.
SIN LIMITES
Paco Chust observa que con este software puede hacer cualquier cosa, “no tengo ninguna limitación”, admite. “Cuando dibujo en TOPSOLID, estoy haciendo la ingeniería inversa, es decir, montando el mueble al revés. Pensando cómo se tiene que procesar en su última fase, la del montaje. Con esa perspectiva, optimizamos el diseño del mueble desde el final, hasta el principio. El programa me permite verlo en profundidad, estudiarlo y mejorarlo”. Todo ello documentando el trabajo con una completa planimetría, para poder trasladarlo a los demás actores del proceso; a los proveedores, en fábrica y, por supuesto, al instalador. Para que no haya ningún error. Esta herramienta ayuda también a alcanzar los certificados de calidad deseados; a cumplirlos y documentarlos.
TOPSOLID no es un programa que sirva exclusivamente para el diseño. Es una solución que nos traslada también al mecanizado. Que se adapta a la forma como se trabaja en el taller. Por ejemplo, descontando el espesor del canto en las listas de materiales o adaptando las medidas de todas las piezas gracias a la parametrización. “Su interface coincide con lo que yo pienso -concluye Paco Chust-. Es una herramienta rápida para construir. La más cara, pero funciona. Además es escalable; puedes empezar dibujando cascos y cocinas, y llegar a una solución de mecanizado a cinco ejes”.
ARDIS TOMA EL TESTIGO
A partir del dibujo con TOPSOLID se obtiene un fichero de exportación que se transporta a ARDIS.
ARDIS optimiza y genera un informe. Por ejemplo, para hacer un pedido al proveedor de lacado. ARDIS es capaz de aclarar qué piezas y qué caras de las mismas han de ser lacadas, y con qué material y recubrimiento. Cotizando además lo que el lacador tiene que cobrar. Sucede lo mismo con el cristal que lleva una puerta o un mueble; el informe de ARDIS optimiza y cotiza este material, que suele ser oneroso si la compra se realiza simplemente con un Excel.
Además de tener un control sobre las materias primas y sus costes, se eliminan los márgenes de error en la fabricación y el montaje. La producción se va automatizando y la información queda depositada en una única plataforma, adonde se puede acudir en otra ocasión, si fuere necesario. “Evidentemente, la implantación del software implica el compromiso y esfuerzo de todo el equipo en la empresa”, remarca Paco Chust.
PRIMERO EL SOFTWARE, DESPUES LAS MAQUINAS
Implementar, conocer y dominar el software permite al industrial seleccionar mejor y amortizar antes la maquinaria para su taller.
Por ejemplo, MASARMARIO acaba de adquirir un nesting con quinto eje de BIESSE. Al día siguiente de su instalación, su conexión con ARDIS fue inmediata y la máquina estaba ya funcionando al cien por cien, plenamente integrada en el flujo flexible de la producción. “Estoy convencido que sin nuestro paquete informático, no estaríamos sacando a la máquina el mismo rendimiento”.
En efecto, las máquinas son cada vez más flexibles y productivas. Sin una buena herramienta de software muchas empresas no lograr extraer su potencial de rendimiento.
“Mi empresa y mi equipo hemos crecido con el software -asegura Paco Chust-. Que nadie piense que la digitalización de los procesos es algo fácil. Ni barato. Es rentable, y el retorno de la inversión es espectacular”.
TOPSOLID para dibujar y ARDIS para gestionar la producción son inherentes e imprescindibles en MASARMARIO y MINO COCINAS. “Se complementan perfectamente -explica Antonio Gutiérrez, director de ARDIS SOFTWARE, S.L. y de PROSOLID 3D-. ARDIS analiza toda la información que llega de TOPSOLID, optimiza materiales y también procesos, incluso lleva cada pieza a la máquina conveniente, entre las disponibles en el taller”.
PROSOLID 3D, AL SERVICIO DEL CLIENTE
PROSOLID 3D lleva a cabo desarrollos digitales a medida de las necesidades de su cliente. Mediante el programa CNC CREATOR de diagnóstico de la planta de fabricación; la forma de trabajar, las limitaciones de configuración, etc. En definitiva, una auditoría de gran valor, ya que pone los cimientos para dar los primeros pasos adecuados hacia la digitalización. El programa se ocupa de todo: Orienta y guía al empresario, y garantiza la optimización de los procesos. En muy poco tiempo, y recuperando rápidamente la inversión.
PROSOLID 3D se dedica a desarrollar e implementar software en empresas fabricantes de muebles y elementos de carpintería, y enlazarlas y hacerlas funcionar en todas las máquinas del mercado. “En PROSOLID 3D somos especialistas en el sector de la madera. De hecho, somos pioneros y representamos a TOPSOLID exclusivamente para las empresas fabricantes de muebles y carpintería industrializada. El propio software se ha desarrollado a partir de ciertos criterios que eran necesarios para ARDIS, trabajando con empresas y con personas del sector de la madera y el mueble”, explica Antonio Gutiérrez.
La comunicación entre PROSOLID 3D y MASARMARIO y MINO COCINAS es fluida. “Estamos coordinados, enfocados a una mejora continua, por ambas partes. Todos aprendemos, no imponemos nuestra forma de pensar preconcebida”. En efecto el entendimiento entre ambas empresas hace que la formación continua, las actualizaciones y el servicio técnico funcionen muy bien, con los problemas lógicos que surgen durante una implementación compleja. “El software es algo intangible, que requiere una actitud positiva, paciente, encaminada a mejorar, a hacer muchas más cosas en menos tiempo y con menos errores. Y una oportunidad para que los trabajadores también crezcan profesionalmente, sin prisa, al ritmo adecuado”.
SIMBIOSIS TOPSOLID-ARDIS
Sergio Nogués, responsable de ingeniería de producto en la oficina técnica de MASARMARIO y MINO COCINAS, proviene del mundo de la construcción, donde utilizaba el AutoCAD, un programa que conoce a la perfección. “De ahí partía todo, hasta un Excel que se trasladaba a la carpintería, para poder iniciar los trabajos”, relata-. Hasta que se decidió incorporar TOPSOLID; un software para diseñar en 3D, aplicable a la madera.
“Como todo el mundo, yo era reacio al cambio. Pero cuando te habitúas al TOPSOLID, tienes el AutoCAD como una herramienta auxiliar, que puede ayudar si algún cliente nos pasa la información por ahí, aunque yo inmediatamente la trasvaso a TOPSOLID”. Y es que todo el mecanizado que se hace en ese 3D es exportable a las máquinas: “Antes dibujaba y pasaba todos los pedidos a mano en un Excel, para luego programarlos a pie de máquina. Con TOPSOLID está todo ensamblado y, cuando lo exporto a la máquina, tengo planos y salen los programas necesarios para fabricar el mueble”, explica.
Antes, posibles cambios realizados en el diseño sobre la marcha obligaban a reiniciar todo el trabajo, con un alto riesgo de error. “Con TOPSOLID, los cambios son inmediatos y, como es paramétrico, se realizan automáticamente para todas las piezas del mueble”.
Otro triple salto de Sergio Nogués en MASARMARIO y MINO COCINAS se produjo cuando comenzó a trabajar con ARDIS. “Ahí es donde yo me di cuenta del tiempo que se ha perdido en mi anterior empresa, pensando que lo hacíamos bien… -admite-. ARDIS es una herramienta básica en una carpintería”.
En efecto, cuando TOPSOLID exporta la información a ARDIS y éste, simplemente tocando un botón, automáticamente, saca todo el despiece, realiza una optimización, un listado de herrajes, un listado de piezas, tiempos de cortes… Y cada pieza va a la máquina que debe mecanizarla, sea de la marca que sea y haga la función que haga !
“Basta con chequear con un lector el código de barras que porta cada pieza, ni siquiera hace falta hablar con los operarios en el taller –asegura Sergio Nogués-. Cuando se vive esta experiencia después de haber trabajado sin estos programas, valoras de verdad el tiempo y las cosas bien hechas”.
Con todo, Paco Chust es una persona que siempre está innovando, “rizando el rizo”, dicen sus empleados. Sólo hay que aguardar al siguiente paso de su empresa en cuanto a digitalización, mecanización, diseño, logística… Se lo contaremos.