Un equipo de especialistas en química de los institutos tecnológicos AIDIMME e ITQ está desarrollando un proceso adaptado de recuperación de residuos para realizar nuevos tableros a partir de materiales sostenibles y biodegradables procedentes del sector forestal y textil para distintas aplicaciones y usos, como aislantes térmicos y acústicos en construcción o la fabricación de mobiliario, entre otras utilidades.
La iniciativa parte del proyecto TABIOL “Investigación sobre la valorización industrial de residuos de biomasa autóctona y algodón del sector textil mediante un proceso de carbonización hidrotermal para los sectores del mueble y la construcción”, coordinada por AIDIMME en colaboración con los socios del Instituto de Tecnología Química, ITQ, (centro mixto de la Universidad Politécnica de Valencia y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, CSIC) y las empresas Ingelia, S.L e Indutec Solid, S.L., y está financiado por la Agencia Valenciana de la Innovación, AVI, hasta julio de 2024.
INNOVACIÓN CIRCULAR
TABIOL pretende aportar innovación en el proceso de carbonización hidrotermal que produce un material denominado “hydrochar” (similar al conocido pelet) utilizado hasta la fecha como recurso energético, y adaptarlo para dotar de nuevas funcionalidades a la nueva materia prima reutilizada que podría pasar a llamarse TABIOL (tablero biológico) e incorporarlo a un entorno de economía circular.
Según explican los socios del proyecto, el agotamiento de los recursos naturales utilizados tradicionalmente, la acumulación de residuos o la contaminación del medio ambiente son algunos de los problemas que encara la sociedad hoy en día.
Frente a ello, los investigadores defienden la necesidad de integrar la economía circular, es decir, reutilizar y reciclar los materiales de que disponemos durante el mayor tiempo posible. “Por ello, es necesario encontrar nuevas materias primas generadas a partir de los residuos formados en el entorno cercano para producir materiales y productos de larga duración”, apuntan desde TABIOL.
REDUCIR LA CONTAMINACIÓN
Los promotores de la iniciativa destacan que TABIOL aportará soluciones que permitirán reducir el ingente volumen de residuos textiles de algodón que en gran medida acaban incinerados en vertederos, y dará salida a la biomasa forestal y restos de poda que en la actualidad se queman en el propio campo, con las correspondientes emisiones de CO2 y perjuicio medioambiental.
En su diagnóstico, el equipo de TABIOL señala que una de las industrias más contaminantes en la actualidad es la textil, entre otras cosas porque generan una gran cantidad de residuos. Por un lado, están los subproductos industriales y por otro, los generados a nivel particular en los hogares. “Lejos de solucionarse, la moda rápida está haciendo que esta problemática se esté agravando, con lo cual, urge encontrar soluciones para transformar estos residuos en productos con algún valor industrial”, indican los socios del proyecto.
El equipo de trabajo aclara que por otro lado existen residuos generados de manera natural cuya acumulación puede llegar a ser problemática y que se podrían emplear para fabricar otros productos, como la biomasa residual forestal y agrícola. Tradicionalmente, estos residuos se han considerado de bajo valor y se han quemado en el mismo campo. Al ser desechos altamente inflamables, existe el riesgo de que provoquen incendios descontrolados que se propaguen a alta velocidad, además de emitir grandes cantidades de CO2 a la atmósfera. Por estas razones, en los últimos años se están promoviendo políticas para revalorizar este tipo de biomasa, explican.
Así, TABIOL pretende aportar innovación en el proceso de carbonización hidrotermal que produce un material denominado “hydrochar” (similar al conocido pelet) utilizado hasta la fecha como recurso energético, y adaptarlo para dotar de nuevas funcionalidades a la nueva materia prima reutilizada que podría pasar a llamarse TABIOL (tablero biológico) e incorporarlo a un entorno de economía circular.
RESTOS DE PODA DE OLIVO, PINO CARRASCO
En el proyecto TABIOL se van a utilizar los residuos de dos especies arbóreas: los restos de poda de olivo que, necesariamente, se deben realizar para que el árbol produzca olivas en cantidad y calidad adecuadas, así como los residuos procedentes del pino halepensis (o carrasco), el cual es la especie dominante entre las coníferas, presente en el 72% de la superficie arbolada y considerado taxón fundamental en la Comunitat Valenciana.
El proyecto tratará la materia prima mediante un proceso de carbonización hidrotermal. En él, se concentra el carbono en biomasa húmeda produciendo un material sólido carbonoso (el hydrochar) Y es en un segundo paso cuando se optimizan las características químicas de este material para la fabricación de tableros de partículas.
De este modo, se pretende desarrollar un único proceso para tratar residuos de distinta naturaleza y diversificar el empleo del hydrochar, que hasta la fecha se ha destinado únicamente a fines energéticos.
Así, el proyecto presenta una alternativa para revalorizar estos residuos fuera del sector energético y reduciendo la emisión de CO2, ya que, en la actualidad, tanto la materia prima, como el producto tratado mediante carbonización hidrotermal se destinan principalmente a la combustión. En su lugar, se formarán tableros de larga duración que se puedan usar tanto para mobiliario como para aislamiento térmico en construcción, sustituyendo materiales que, en su mayoría, son procedentes de derivados del petróleo.
“Estos ecotableros proporcionarán, tanto al sector de la construcción, como al de del mueble, materiales más sostenibles, de los que, a su vez, se estudiará su reciclaje y reutilización como nuevos tableros al final de su vida útil, de manera que puedan incrementarla y contribuir en mayor medida a la economía circular”, añade el equipo de TABIOL .