El sector de la madera se enfrenta a numerosos retos diariamente. En lo que respecta a la consecución de materia prima, no únicamente debe velar porque su impacto ambiental sea el mínimo posible, sino que también se añade otra complicación: las empresas han de trabajar constantemente en entornos complejos, terrenos desafiantes que pueden incluir desde zonas montañosas hasta espacios de muy difícil acceso. Los bosques pueden ser impredecibles y es por ello por lo que los profesionales del sector deben estar preparados para llevar a cabo su actividad en cualquier circunstancia.
La tala de árboles es solo una parte del proceso de explotación forestal. Previamente al corte de árboles, éstos han tenido que ser marcados por los agentes forestales para así asegurar la sostenibilidad de la actividad que va a llevarse a cabo. Una vez cortados los árboles seleccionados, éstos han de ser extraídos del terreno en el que se encuentran. Una tarea que puede volverse muy compleja según la situación de cada pieza, las condiciones meteorológicas, el barro, los desniveles y los numerosos obstáculos que se encuentran habitualmente en los bosques.
Tras la extracción, llega el momento de transportar los troncos resultantes hasta los aserraderos. Lugares en los que se lleva a cabo el resto del proceso por el cual el tronco se transforma en un producto finalizado y comercializable: aserrado, secado, tratamiento, lijado, barnizado… Y espacios, además, en los que va a ser necesario mover grandes pesos de madera de un lado a otro de forma constante. Del camión a las máquinas de aserrado, de ahí a los secaderos… y así con cada pieza.
Queda claro, por lo tanto, la dificultad del trabajo que desempeña día a día cada empresa dedicada a la transformación de la madera. No obstante, la tecnología, cada vez más avanzada e innovadora, puede ser un aliado estratégico en el desempeño de las funciones más engorrosas de cada negocio del sector. Y es que hoy pueden encontrarse máquinas para facilitar cada parte del proceso forestal. Especialmente, equipos que optimizan las labores de movimiento y transporte de mercancía incluso en los terrenos más complejos: estamos hablando de las carretillas elevadoras 4×4.
UN ALIADO ESTRATÉGICO PARA LA INDUSTRIA FORESTAL
Las carretillas elevadoras 4×4 permiten manipular cualquier tipo de carga en todo clase de terrenos. Son muy compactas, potentes, polivalentes y tienen un radio de giro mínimo, ofreciendo una gran maniobrabilidad en los terrenos más complicados y con difícil acceso. Es decir, son ideales para la carga y transporte de troncos -o madera procesada- en terrenos irregulares, con grandes desniveles, barro y obstáculos. En definitiva, son las máquinas idóneas para trabajar tanto en la primera parte del proceso forestal como en las que la siguen.
El movimiento por las desafiantes superficies de bosques se vuelve sencillo con la utilización de una carretilla 4×4. Gracias a su tracción inmejorable, son capaces de desplazar cargas de mucho peso y/o volumen del modo más eficaz y seguro, aumentando así la productividad y rendimiento de las empresas del sector. Una característica perfecta tanto para las labores de tala y extracción en terreno como en las de transporte una vez en las instalaciones de aserraderos o naves industriales.
Asimismo, la adquisición de estos equipos puede ser simple y accesible para cualquier empresa, todo gracias a los distintos tipos de modalidades de compra que hoy pueden encontrarse en el mercado. De forma especial, la compra de segunda mano destaca por los múltiples beneficios que ofrece a cualquier negocio del sector. Y es que comprar carretillas 4×4 de segunda mano es una opción inteligente que permite disfrutar de las ventajas de estos equipos con un bajo desembolso. Además, esta modalidad acerca las primeras marcas, calidades y tecnologías del mercado a cualquier bolsillo.
Es posible encontrar carretillas elevadoras todoterreno de ocasión capaces de cargar entre 1.500 y 3.500 kilos de peso, de las mejores marcas del mercado, con total garantía de calidad y de resultados. Son muchas las ventajas de optar por la modalidad de ocasión para configurar la flota de maquinaria de una empresa dedicada al sector forestal. Entre ellas, destaca el que son mucho más económicas y que no pierden en rendimiento, ya que las constantes revisiones a las que son sometidas garantizan su óptimo estado, así como los mejores resultados.
En definitiva, seleccionar carretillas elevadoras 4×4 significa escoger a un aliado indudablemente estratégico para aumentar la productividad de cada uno de los procesos de la actividad forestal. Así, los desafíos a los que el sector se enfrenta a diario serán mucho más sencillos de superar con éxito.