Fuente: DIARIO DE BURGOS – L.M. – sábado, 29 de mayo de 2021 – Fotografía: Luis López Araico
Hace apenas cinco años, en el interior de la planta que Duo-Fast tiene en el polígono de Villalonquéjar no había ni rastro femenino. El 100% de los cerca de 60 trabajadores que tenía en plantilla el fabricante de clavos industriales eran hombres, así como los empleados temporales que completaban y ayudaban a la producción en los picos de demanda. Sin embargo, todo ello cambió con la incorporación como directora de la factoría burgalesa de Aida Jimeno a finales de 2017. Fue en diciembre de ese curso cuando entró como responsable de la Unidad de Negocio, avalada por el grupo al que pertenece Duo-Fast, la multinacional americana ITW (Illinois Tool Works).
Una de las primeras medidas que planteó fue marcarse como objetivo que mínimo la mitad de las nuevas contrataciones que se fueran a efectuar desde ese momento fueran mujeres. De este modo, la compañía cuenta en estos momentos con un nada reseñable 20% de empleo femenino, ocupando puestos en las distintas líneas de elaboración de clavos. Además, la incorporación de trabajadoras no solo se ha circunscrito a puestos de fabricación, sino que ocupan responsabilidades como la jefatura de producción. Esta decisión, explica la propia Jimeno, se basa en una filosofía que ITW aplica con todas sus filiales. «Quién mejor que las propias plantas, en el país en el que están, para saber lo que hay que hacer», recita de carrerilla.
La empresa aplica una política de contratación que se basa en que al menos el 50% de las nuevas incorporaciones sean mujeres
Junto a la política del fomento del empleo femenino, la compañía tiene previsto invertir un millón de euros en los próximos años -ya llevan otro desde 2018- para apostar por la automatización en sus líneas de producción pero sin perder plantilla. En la actualidad muchas de sus tareas son esencialmente manuales, y en aras de poder incrementar sus beneficios, van a acometer una profunda reorganización. El primero paso que dieron fue la venta de unas antiguas instalaciones contiguas -que han sido adquiridas por Maniplastic- ya que en su actual parcela, de 49.000 metros cuadrados, apenas tienen construidos 11.000, lo que les da una enorme capacidad de crecimiento a futuro. «Ya hemos empezado a colocar compresores dentro de programas de eficiencia energética y el siguiente paso es readecuar las máquinas, siempre teniendo en cuenta los parámetros de seguridad», explica.
Todos esos cambios les permitirán aumentar su facturación en torno al 20% de aquí a 2024, alcanzando una cuota de cerca de 15 millones de euros anuales. «Queremos que sea una transición gradual, ya que al mismo tiempo que hagamos referencias nuevas iremos sacando las de menor volumen», apunta Jimeno, que reconoce que en estos momentos fabrican «demasiadas» que deben ser sustituidas por tiradas de mayor volumen de productos mucho más comunes.
De doscientos a dos. Su objetivo es centrarse en dos tipos de procesos: clavos encintados en bobina de plástico y otros encinatados en papel. No obstante, de esas dos referencias tienen una gama de subproductos enorme, que también quieren ir reduciendo conforme amplíen la producción. «Ahora tenemos más de 200 tipos, pero nos queremos hacer expertos en una gama premium o exclusiva nuestra», apunta Jimeno. El destino final de estos materiales es, sobre todo, su inserción en las clavadoras o taladros o su aplicación en madera.
Todos estos materiales que salen desde Villalonquéjar terminan en construcciones -sobre todo casas prefabricadas- fuera del territorio nacional. Estados Unidos y, sobre todo, Alemania y los países nórdicos, son sus principales destinos, previo paso por los centros de distribución de ITW. «Antes de su entrada nos centrábamos en los pequeños clientes pero el enfoque del negocio ha cambiado. En España no se vende este tipo de producto como tal», reconoce. Además, asegura que el incremento del coste del transporte en la nación norteamericana, fruto de las políticas del Gobierno, está provocando cierto bajón del negocio y de las exportaciones desde Burgos. Ello se contrarresta con el importante repunte que están notando desde verano del año pasado, y que se relaciona directamente con el boom desatado, parece ser que también en Europa, con las reformas del hogar.