por

El CEN aprueba dos informes de CESEFOR sobre clasificación de madera de haya y pino silvestre para uso en construcción

Mejora la competitividad de las empresas de la industria de la madera.

El Comité Europeo de Normalización (CEN) ha aprobado, a falta de algunas correcciones editoriales, 2 nuevos informes desarrollados por Cesefor para clasificación mecánica de la madera para uso estructural de haya y pino silvestre. El Comité Europeo de Normalización (CEN) es uno de los 3 organismos europeos de normalización que adoptan normas armonizadas de aplicación en el territorio europeo.

El equipo de Industria y Construcción con Madera del centro defendió en el CEN de “estructuras de madera: madera sólida” (TG1 WG2) celebrado el pasado 11 de abril dos nuevos informes para clasificación mecánica de la madera para uso estructural para pino silvestre para grandes escuadrías y para haya.

Estos se suman a los redactados anteriormente para pino radiata, pino marítimo, pino silvestre de pequeñas escuadrías en tracción y pino silvestre de pequeñas escuadrías en flexión. En estos momentos se sigue trabajando en los informes para pino laricio, pino pinaster y abeto douglas, que verán la luz próximamente.

Cesefor se convierte así en la primera entidad a nivel estatal que desarrolla este tipo de informes para clasificación mecánica en su línea de trabajo de apoyo a la mejora de la competitividad de las industrias de la madera.

SISTEMA HOMOLOGADO

La clasificación de la madera supone un paso clave en los procesos de fabricación de madera estructural para determinar las prestaciones mecánicas y potenciales de uso.

Aunque se puede realizar de forma visual, la capacidad para clasificar la madera de forma mecánica supone para las industrias disponer de un sistema homologado clave para la madera estructural orientada a la construcción, lo que representa un importante avance tecnológico frente a la visual.

La clasificación mecánica ofrece mucha más fiabilidad que la clasificación visual y por tanto, permite clasificar la madera aserrada en un amplio abanico de clases resistentes en función de la especie y la tecnología seleccionada, minimizando la madera rechazada. Además, mayor volumen de madera se clasifica como apta para el mercado de estructuras de madera y se obtienen más piezas clasificadas en clases resistentes elevadas.

La clasificación mecánica permite altas resistencias a flexión: en el caso del haya hasta D50, y en el del pino silvestre hasta C40, consiguiendo una mejora de casi el doble de resistencia que la obtenida hasta ahora mediante la clasificación visual.

Asimismo, con este sistema de clasificación se puede trabajar con la madera tanto en verde como en seco, lo que facilita una optimización de los procesos en las industrias, porque permite elegir la manera de clasificar y ahorrar costes en secado.

APERTURA DE NUEVOS MERCADOS Y CONFIANZA DE CONSUMIDORES

Los informes aprobados se incluirán en los equipos del fabricante Brookhuis, empresa que fabrica productos para medir la clase resistente de la madera. Su campo de aplicación abarca la clasificación estructural de madera en diferentes industrias, así como el control de calidad en obra permitiendo asegurar la resistencia en obras de la madera recibida.

El desarrollo de estos sistemas de clasificación de la madera estructural aplicando estas normas permiten abrir mercados ya que, con ellas, los productos o servicios son compatibles y comparables. Aunque las normas son voluntarias, aplicarlas demuestra que los productos cumplen con la legislación europea y además, que los productos y servicios poseen un cierto nivel de calidad, seguridad y fiabilidad, lo que genera mayor confianza en los consumidores.