Vivimos un periodo en el que el universo del mueble, fuertemente diversificado, está experimentando una temporada muy positiva, con un crecimiento de dos dígitos que involucra a todos los segmentos del mueble, una tendencia que todos los observadores indican «en constante crecimiento» en términos globales hasta 2027.
Una demanda fuerte, por tanto, pero que hoy más que nunca está «condicionada» por requisitos específicos: Productos «duraderos», que garanticen mantener sus prestaciones durante mucho tiempo; productos seguros para todos, capaces de garantizar la confianza necesaria en cualquier lugar y para cualquier necesidad de uso final. Productos que se asocian cada vez más con la marca, con el nombre del productor, que es cada vez más sinónimo de fiabilidad, confianza, seguridad… todos los valores que las pruebas, los análisis y las certificaciones de los productos objetivan. Y por último, pero no por ello menos importante, productos respetuosos con el medio ambiente, que desde su diseño hasta su eliminación al final de su ciclo de vida, demuestran ser respetuosos con el medio ambiente, requieren el menor uso posible de energía y recursos.
«Hoy la calidad no es una especie de ‘privilegio’ que se adquiere eligiendo a un artesano especialmente hábil o comprando un bien del que alguien decide presumir: hoy la calidad es medible, evaluable y objetivamente certificable»
Franco Bulian, director de CATAS
Valores a los que los consumidores de todo el mundo prestan cada vez más atención, una tendencia que influye de forma decisiva y positiva en las actividades de CATAS, el más importante laboratorio europeo de ensayos y certificación para el sector de la madera y el mueble, cuyos indicadores económicos muestran un crecimiento continuo también para 2021. Según las primeras estimaciones, el año en curso se cerrará con un aumento de la facturación de alrededor del 6 por ciento, con un nuevo crecimiento en el número de pruebas realizadas para sus más de 2.000 clientes en 65 países de todo el mundo.
Un crecimiento que ha convencido al Consejo de Administración de CATAS para poner en marcha nuevas e importantes inversiones: se construirá un nuevo edificio de tres plantas en la sede de San Giovanni al Natisone (Udine), de 2.400 metros cuadrados que permitirá albergar nuevos laboratorios para potenciar numerosas actividades. También se reforzará la plataforma «Testing 4.0», una verdadera red que desde hace varios meses permite gestionar en tiempo real los más de 100 puestos de prueba que funcionan las 24 horas del día en la sede de San Giovanni y en la de Catas Brianza, la sede de Lissone, en el corazón de un barrio del mueble famoso en todo el mundo.
Un deseo de estar más cerca y más integrado en los más importantes «distritos del mueble» italianos que CATAS ha confirmado con la apertura del primer «Catas Point» en Pesaro, en colaboración con Manifaktura.
Un crecimiento que pasa también por los nuevos servicios que ofrece el laboratorio, como la evaluación de riesgos de los muebles incluyendo los electrificados, aquellos que contienen sistemas activados o utilizados gracias a la presencia de dispositivos eléctricos.
También hay un aumento significativo en todas las actividades de formación que forman parte de la «Academia Catas», una demanda creciente de oportunidades para profundizar en los estudios y conocimientos que se articulan -según las necesidades de los solicitantes- en los laboratorios de CATAS, en las aulas, online o incluso en las empresas: en total, este año se impartirán más de 50 cursos para más de 300 horas de formación.
CATAS no se limita a medir productos o rendimientos sino que, ante la demanda de verdaderos certificados de calidad de los que los usuarios o consumidores finales puedan entender inmediatamente el valor, está ampliando su negocio de certificación de productos. A través del «Premio CATAS a la Calidad», el Instituto atestigua las emisiones de formaldehído de los paneles de madera, la calidad de los revestimientos, las prestaciones de adherencia de las vigas de madera encolada y la seguridad de las superficies de los parques infantiles. Una certificación específica es la dedicada a la designación del origen y la calidad «Made in Italy». Una actividad cada vez más importante, que se promoverá aún más con un nuevo sitio web específico a finales de este año.
Siguiendo con la calificación de los productos, pero con una perspectiva diferente, cabe mencionar que CATAS ha lanzado un nuevo servicio dedicado a la sostenibilidad. Un tema que cada vez es más considerado por muchas personas pero, muy a menudo, sin el conocimiento adecuado de su verdadero significado. Por esta razón, CATAS ha activado recientemente un proceso de cualificación interna que hoy permite a sus técnicos ser capaces de «medir» objetivamente y con gran precisión la «sostenibilidad» real de un producto, desde su diseño hasta su eliminación. «El ciclo de vida medido por Catas» es un protocolo que se basa en el método mundialmente reconocido para «calcular la sostenibilidad», el «Life Cycle Assessment (Lca)» basado en las normas ISO.
«Hoy la calidad no es una especie de ‘privilegio’ que se adquiere eligiendo a un artesano especialmente hábil o comprando un bien del que alguien decide presumir: hoy la calidad es medible, evaluable y objetivamente certificable. Un valor absoluto y compartido que los consumidores exigen y que es esencial para que las empresas mantengan la fiabilidad y la competitividad», expresó Franco Bulian, director de CATAS, en una rueda de prensa ofrecida a la prensa especializada del sector en SICAM, el Salón de Componentes y Accesorios para la Industria del Mueble.
