BASOCO es un centro de bricolaje y ferretería ubicado en el barrio vitoriano de Arana que, además, diseña, fabrica y vende muebles de cocina, baño y armarios.
BASOCO confía plenamente en el asesoramiento y servicio de Maesma. Trabaja con dos escuadradoras Altendorf, y acaba de comprar una chapeadora Hebrock, con la cual realiza todo el trabajo de acabado de las piezas de sus muebles de cocina y baño.
Ubicado en una posición elevada, el calderín permite que el flujo de la cola siempre sea en el sentido de la gravedad. Siempre líquida, la cola pasa por el tubo sin obturarlo; algo que sucede en la generalidad de las chapeadoras de cantos.
Los motores de esta máquina, dotada de tupí a la entrada, trabajan a una velocidad de avance 10 metros por minuto, a 18.000 r.p.m. El acabado es muy bueno, y no se nota el paso de cuchillas.
Para acabar la pieza sólo resta redondear la esquina cuando canteamos la pieza a cuatro caras. Para ello, BASOCO ha incorporado a la máquina un grupo redondeador de esquinas.
«Aparte de presumir de acabados, no tenemos que repasar ni limpiar nada -explica Diego Bombí, gerente del bricolaje vitoriano-. La máquina se ajusta sola y siempre alcanza una precisión absoluta. Es una máquina muy robusta y fiable, que ya ha hecho desde septiembre miles de metros».