Se han tratado 614 hectáreas, repartidas en los términos municipales de Velascálvaro, El Campillo, Quintanilla de Onésimo, Pesquera de Duero y Villamarciel; poblados principalmente por pino piñonero (Pinus pinea).
El tratamiento, realizado con helicóptero por una empresa vallisoletana, se ha aplicado a ultra bajo volumen (UBV), siendo ésta una técnica de dispersión que aplica volúmenes muy pequeños del producto en concentraciones elevadas y dilución con agua.
El producto utilizado para este tratamiento ha sido Bacillus thuringiensis (var. Kurstaki), bacteria utilizada para su uso en Lucha Biológica. Esta es la primera vez que la Asociación Forestal de Valladolid utiliza este producto en los montes de sus socios, respondiendo a la demanda creciente de los propietarios a utilizar métodos de control respetuosos con el medio ambiente, evitando el empleo productos químicos dañinos para otras especies animales.
La procesionaria del pino ocasiona un debilitamiento de las masas, lo que trae consigo un descenso en la producción de piña, repercutiendo de forma negativa en los ingresos de la población local; siendo éste un recurso de gran importancia en estas comarcas forestales.
Por otro lado, la presencia de pilosidad urticante de estas orugas ocasiona una irritación en la piel y en las membranas mucosas, acompañadas a menudo de fuertes reacciones alérgicas, lo que dificulta los trabajos en el monte (piñeros y motosierriestas) y la utilización lúdico-recreativa de los mismos.
Las zonas que se han tratado son susceptibles a esta plaga, ya que en los últimos años han sufrido ataques, alcanzando niveles 2-3 de infestación (en una escala de 0 a 5).
El tratamiento se ha realizado abonándolo íntegramente por cada uno de los propietarios, siendo la Asociación la entidad que ha agrupado a los propietarios, y contratando los servicios de la empresa encargada del medio aéreo, y el producto directamente de una fábrica murciana, lo que ha ocasionado que el importe del tratamiento haya sido lo más ajustado posible.