por

La falta de claridad en las medidas de erradicación del nematodo podría cerrar 40 empresas

El sector demanda que se revise el marco en el que se puede desarrollar la actividad empresarial en la zonacero por considerar las medidas actuales “inviables”.

La industria gallega de la madera ha demandado a la Consellería do Medio Rural que «revise el marco» de medidas previstas para erradicar el brote del nematodo, porque éstas abocan a más de 40 empresas de rematantes y aserraderos de la zona al cierre.

 

La secretaria general de Fearmaga, Ana Oróns, ha denunciado que, tres meses después de la detección del brote, la Consellería do Medio Rural no ha aclarado aún aspectos relevantes de las medidas para la erradicación del nematodo. «A día de hoy no sabemos qué podemos hacer con los subproductos de madera, a los que es imposible someter a un tratamiento de choque térmico», apunta.

 

Menor perjuicio para el sector

 

Oróns ha solicitado que se revise el marco en el que se puede desarrollar la actividad en la zonacero «o las empresas de la zona tendrán que cerrar, con la consecuente pérdida de 350 empleos» y recordó que en la Resolución del 26 de noviembre la Consellería do Medio Rural se comprometía a que las medidas se adoptarían «con el menor perjuicio» para las empresas.

 

Fernando Castro González y José Manuel Freiría, propietarios de aserraderos en la zona demarcada, señalan que los empresarios están dispuestos «a asumir todas las medidas necesarias para la erradicación del brote» pero necesitan que la Consellería do Medio Rural «disponga de medios humanos y materiales para que las decisiones fijadas supongan el menor perjuicio para los empresarios». Además, apelaron a la responsabilidad de todos los agentes implicados para erradicar el brote del nematodo.

 

Entre las medidas más perjudiciales, la industria señala la prohibición de corta de madera, desde el próximo 1 de abril hasta el mes de noviembre, «lo que a efectos prácticos supone, primero, el cese de actividad para los rematantes y, segundo, el cierre de los aserraderos por desabastecimiento de materia prima, porque traerla de otras zonas de Galicia no es competitivo, con el consiguiente perjuicio para la cartera de clientes», apunta Ana Oróns.