La gran novedad de PASLODE en nuestro sector es la nueva versión de la clavadora IM50 F18 Litio, ideal para realizar trabajos de interiorismo con madera: Zócalos, cantoneras, jambas, premarcos, tapas, biseles, etc.

Es una clavadora de gas, con batería de litio, que va a dar a su usuario en torno a 10.000 disparos por cada carga de batería, con 25 Julios de impacto.

Esta máquina clava un pin con cabeza, tipo “Brad”, ideal para acabados por su cuidada estética. “Una herramienta para que el instalador sea más productivo y trabaje más cómodo y seguro”, explica Iñigo Reyes, delegado comercial de SPIT PASLODE Iberia en el País Vasco.

CLAVADO A GAS MADERA-MADERA

PASLODE reúne la gama más amplia del mercado de máquinas para el clavado de madera. Con tecnología a gas y clavado a pólvora. Ideal para los estructuristas de madera.

Nació en Estados Unidos, donde se ha erigido como herramienta imprescindible en el montaje de las casas de madera, en obra interior y exterior (cubiertas, estructuras de madera con conectores…), y se incorporó hace varios años a la familia de productos del Grupo ITW, también para Europa.

Además de las clavadoras, PASLODE ofrece la grapadora a gas IM200, idónea para hacer cerramientos.

Entre otras máquinas de la gama, la IM45 Litio es ideal para clavar tégola canadiense sobre cubiertas de madera y la GN45 es para clavar planchas de cinc sobre madera.

“Trabajar a gas es sinónimo de comodidad -apunta Iñigo Reyes-. El operario puede subir al tejado de una cubierta sin portar ni arrastrar compresor ni manguera, evitando riesgos y sin necesidad de disponer de corriente eléctrica para poder trabajar. A lo cual se suman la ergonomía y la ligereza de nuestras clavadoras”.

Comparando con el clavado a mano (martillo y clavo), la productividad y rendimiento que supone trabajar con las clavadoras PASLODE se multiplica.

Con total seguridad: Las clavadoras PASLODE incorporan un sistema que impide disparar clavos al aire. Como mínimo, hay que hacer 3 Kg de presión sobre un material rígido y duro. Es decir, sobre la piel humana no actúa. “Tienen muy poco retroceso, amortigua cada disparo y, además, el gas empleado para su funcionamiento no es nocivo”. Basta con tener la batería cargada y el cartucho con clavos para disfrutar de todas sus prestaciones.