El sector italiano de la maquinaria, software y herramienta para las industrias de la madera y el mueble sigue esperando un cambio del escenario económico. La actual fase de reducción de pedidos se prolonga desde hace nueve trimestres y es, sin duda, la consecuencia más evidente del formidable crecimiento registrado por esta industria y la economía en general en el bienio post-pandémico. Esta brusca vuelta a la normalidad ha hecho retroceder los índices hasta los niveles anteriores a la pandemia y, de momento, no se aprecian signos de mejora.
«No debemos rendirnos al pesimismo, ya que los valores se mantienen en niveles significativos», declara Dario Corbetta, director de Acimall, la asociación de fabricantes italianos de maquinaria para la madera. «Sin duda, la situación internacional no apoya a las empresas con una perspectiva optimista que les anime a reconsiderar las inversiones en bienes instrumentales, pero la industria italiana sigue siendo una excelencia de la oferta nacional».
Veamos las cifras de la encuesta trimestral del gabinete de estudios de la asociación, miembro de Confindustria: los datos de abril-junio de 2024 indican una reducción global de los pedidos del 2,8 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2023. Los pedidos internacionales no varían, mientras que los pedidos nacionales registran una nueva caída del 5,9 por ciento en comparación con hace doce meses.
La cartera de pedidos se reduce a 2,9 meses, mientras que los precios desde el 1 de enero de 2024 han aumentado un 0,9%.
Según la encuesta de calidad, el 45% de las empresas entrevistadas espera una estabilidad sustancial de la producción, mientras que el 50% prevé una mayor reducción y el 5% un aumento. En cuanto al empleo, el 80 por ciento de los encuestados -una muestra representativa de toda la industria- espera una tendencia estable, mientras que el 20 por ciento restante teme una reducción.
Las existencias disponibles se mantienen estables según el 55% de los entrevistados, aumentan para el 20% y disminuyen para el 25%.
Este estado de ánimo se refleja en los resultados de la encuesta sobre previsiones: en cuanto al mercado nacional, el 50% de la muestra ve una estabilidad sustancial a corto y medio plazo, el 5% espera una tendencia al alza y el 45% una reducción. Las opiniones están bastante «alineadas» también sobre el mercado internacional: El 50 por ciento cree que la tendencia se mantendrá estable, las cosas empeorarán para el 35 por ciento de los encuestados, mientras que el 15 por ciento (es decir, un 10 por ciento más de opiniones optimistas) apuesta por una demanda más fuerte del resto del mundo.
