El año 2018 ha sonreído al equipo de Grass Iberia con una facturación superior a la de años superiores. Su filosofía es la de optar por la excelencia y diferenciación y parece que dicha estrategia va bien encaminada, ya que así lo demuestran sus números. El equipo constante, entregado y con un objetivo claro, hace crecer su cifra de negocio llegando al objetivo. Con filiales en España y Portugal, y con sede en Iurreta (Bizkaia), la compañía cerró el año 2018 con un volumen de ventas de 10.412.715 euros.
El año pasado, la compañía alcanzó una exitosa etapa a lo largo de su camino hacia el desarrollo. Excedieron los objetivos establecidos, logrando un cumplimiento del presupuesto del 102%. Este incremento en ventas, en clientes y también en número de trabajadores, 1932 a día de hoy, hace que tengamos la marca muy presente. Actualmente se venden productos GRASS en 67 países con más de 3.800 distribuidores.
Parece que la filial, Iberia, sigue los mismos pasos que Austria, logrando llegar al objetivo cada año y aumentando ventas. Esto proporciona un gran impulso y proyección de cara al presente año, en el que la firma se propone unos resultados operativos de más de 650.000 euros, y adquiere una responsabilidad de ventas de más de 16 millones de euros.
Aunque las ventas y la facturación sean un pilar fundamental, de cara a este año la compañía también va a centrarse en otros procesos no menos importantes. En este sentido, tiene previsto la ampliación del nuevo almacén en Hohenems y su funcionamiento, el lanzamiento de nuevos productos, la consolidación de la marca, la responsabilidad social corporativa y las nuevas directrices comerciales.
Estas son algunas de las actuaciones donde se pondrá el focus en Grass Iberia este 2019.