Se trata de una solución con madera laminada para un proyecto de grandes luces, con empleo de paneles estructurales, forjados y vigas de madera y un diseño de nudos muy específico.
Sobre el solar del antiguo mercado de abastos de Reinosa se ha levantado el nuevo Centro Socio-cultural: los autores del proyecto, ganadores del primer premio del concurso de diseño y construcción, son los arquitectos Begoña de Abajo y Carlos García.
La estructura se planteó desde el principio con madera laminada, tanto por el aspecto de la construcción como porque era necesario un espacio versátil, y que la estructura no interfiriese en ni lo fraccionase. Además había una limitación presupuestaria. Hay que considerar que el coste de una estructura crece con la luz entre apoyos de manera considerable.
La claridad geométrica del proyecto permitía adaptar bien las soluciones de la estructura a la arquitectura sin problemas. Aunque era necesario establecer algunas cuestiones estructurales de partida.
La primera: era necesaria una madera de bastante resistencia; la mayor de las laminadas (GL36h), ya que las cargas eran cuantiosas en la primera planta y las luces de las vigas bastante amplias.
La segunda era evitar viguetas en la cubierta, y recurrir a que toda la superficie de cubrición fuera autoportante, lo que impuso el empleo de paneles estructurales de madera con alma de polestireno expandido, que es a la vez aislante térmico.
La tercera, siempre fundamental en cualquier estructura de madera, y más en una de este porte y con ciertos encuentros complicados, era la definición geométrica muy precisa de los nudos, para posibilitar su construcción y su correcto funcionamiento estructural.
Los forjados de la planta intermedia, de viguetas de madera, y las vigas de madera continuas que los sostienen han sido calculados con la aplicación para cálculo de estructuras online e-struc.
El resultado tras la construcción es óptimo, tanto por la presencia del volumen del edificio en su entorno, como por el correcto funcionamiento de la estructura y el acierto final en la definición de los detalles, muy complejos en su diseño interior para que luego aparezcan sencillos y espontáneos una vez construidos.
Este es un caso que demuestra que las estructuras de madera, en contra de lo que suele pensarse no permiten menos prestaciones que otras. Solo es necesario conocer cómo funciona el material y qué limitaciones tiene, sobre todo en cuestiones de deformación y de puesta en obra, aspectos que condicionan la ejecución de las estructuras de madera.
