La Confederación Española de Empresas de la Madera (CONFEMADERA HÁBITAT) celebró el pasado día 20 de marzo en la sede de CEOE en Madrid una jornada sobre Diligencia Debida, que contó con más de medio centenar de asistentes interesados en conocer más sobre el Reglamento Europeo de la Madera (EUTR) que entró en vigor el pasado 3 de marzo de 2013 con la finalidad de evitar el comercio de madera ilegal, y que obliga a todas las empresas que ponen madera y productos derivados por primera vez en el mercado a disponer de un sistema de diligencia debida, bien propio o de una entidad externa.
Tras la apertura de la jornada por parte de la responsable del Departamento de Tecnología y Medio Ambiente de la patronal de la madera, Laura Martín Linares, los representantes del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), Francisco J. Adell y Guillermo Fernández, fueron los encargados de exponer el escenario normativo en general, desde el Plan de acción FLEGT y los Acuerdos Voluntarios de Asociación (AVA), pasando por la EUTR (European Union Timber Regulation -R UE 995/2010, RD 363/2012, R 607/2012-), enmarcándolo en la legislación española y analizando el papel de la autoridad competente española, así como las competencias de las Comunidades Autónomas. A la espera de la legislación que desarrolle la normativa en España la única autoridad competente continuará siendo la Dirección General de Política Forestal.
Los representantes del Ministerio aseguraron que ya hay organismos en España y otros países europeos que se han ofrecido a la Comisión Europea para ejercer de entidades de supervisión, propuestas que están en fase de estudio, aunque se espera que en los próximos meses ya exista alguna entidad de supervisión y que en el primer semestre de 2014 se emitan las primeras licencias FLEGT para que países extracomunitarios puedan demostrar la legalidad de su madera mediante este sistema que contempla también el Reglamento de la Madera (EUTR).
A continuación, el Secretario General de la Asociación Española del Comercio e Industria de la Madera (AEIM), Alberto Romero, expuso las soluciones específicas que esta asociación ha puesto en marcha para los empresarios de su sector: almacenistas e importadores de madera.
La presentación de la herramienta desarrollada por CONFEMADERA HÁBITAT para que todas las empresas del sector de la madera puedan cumplir con la normativa de diligencia debida corrió a cargo de Gabriel Poveda, Ingeniero de Montes y técnico del Departamento de Tecnología y Medio Ambiente de la Confederación, quien expuso el modo en que deben proceder para desarrollar un sistema propio de diligencia debida sin necesidad de acudir a un tercero ni incurrir en costes añadidos. Poveda explicó el procedimiento a desarrollar, la información que debe conservarse, así como el funcionamiento de la herramienta, totalmente gratuita, que está a disposición de cualquier empresa en la web www.diligenciadebida.es con solo registrarse y que les servirá para evaluar y mitigar su riesgo en este ámbito.
Por su parte, Pablo González, representante de la organización NEPCon, informó sobre los procedimientos para realizar un análisis y mitigación del riesgo y las actuaciones que están llevando a cabo en el marco de la normativa EUTR para garantizar un sistema de diligencia debida eficaz. NEPCon ya ha solicitado su reconocimiento como entidad de supervisión.
El cierre de la jornada recayó sobre los representantes de los sistemas de certificación de la gestión forestal sostenible y de la cadena de custodia de la madera PEFC y FSC España, Marta Salvador y Silvia Martínez, respectivamente, que explicaron las modificaciones que han realizado en sendos esquemas para cumplir con la diligencia debida a través de la certificación. La certificación forestal se consolida así como una herramienta muy útil para que las empresas de la madera garanticen la legalidad de sus productos, además de su compromiso con la sostenibilidad.
Los objetivos de un sistema de diligencia debida pueden resumirse en:
– Facilitar información: acceso a la información que describa la madera y los productos derivados, el país de aprovechamiento, la cantidad, los datos del proveedor y el cumplimiento de la legislación nacional aplicable.
– Evaluar el riesgo de que se introduzca en la cadena de suministro madera aprovechada ilegalmente, basándose en la información mencionada y teniendo en cuenta los criterios definidos en el Reglamento de la Madera.
– Mitigar del riesgo: cuando la evaluación revele un riesgo de que se introduzca en la cadena de suministro madera aprovechada ilegalmente, deberá mitigarse pidiendo al proveedor información y comprobaciones adicionales que demuestren la legalidad de la madera en origen.