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“El objetivo de nuestra asociación es dar valor a los bosques tropicales. A la madera tropical”

Benoit Jobbé-Duval, Director General de la ATIBT.

En torno a la madera tropical se han unido una serie de organizaciones del mundo del desarrollo, de las relaciones con los países del sur, temas agrícolas y forestales, desarrollo sostenible, etc. Ahí se encuentra ATIBT, la Asociación Técnica Internacional de la Madera Tropical. MADERA SOSTENIBLE ha hablado con su director general, Benoit Jobbé-Duval.

Benoit Jobbé-Duval, Director General de ATIBT.

“La ATIBT es poco conocida en España y aún son pocas las empresas del país que utilizan nuestros servicios”, admite.

¿Cómo es posible dar valor hoy en día al bosque tropical?

La lucha contra la deforestación se hace a través de acciones de conservación. Pero es imposible poner en conservación toda la masa forestal en la cuenca del Congo, el Amazonas, Indonesia… Son diversos los mecanismos que hay que poner en marcha para lograrlo. La gestión sostenible, que nos ha permitido en Europa promover el uso de la madera y crear riqueza en torno a su uso, nos lleva hoy a tener, en España y en Europa, una masa forestal que está en crecimiento.

En los países tropicales estamos unos pasos por detrás en todos estos mecanismos, porque las acciones de plantación forestal no son están aún muy desarrolladas, por diferentes razones, y aún quedan muchos bosques naturales. Estos bosques naturales han de ser mantenidos. Son objeto de acciones de conservación, y también de acciones de gestión forestal sostenible y explotación.

Lo que busca la ATIBT es luchar contra la madera ilegal, promover el uso de la madera de origen sostenible y el uso de la certificación. En definitiva, promover la madera certificada. Y apoyar de diferentes maneras, tanto en los países productores como en los países consumidores, todos los mecanismos que nos lleven a luchar contra la madera de origen ilegal y promover el uso de madera de origen sostenible.

En este sentido, ¿qué labor desempeña ATIBT en el día a día?

Tenemos que trabajar a nivel del origen mismo de la madera. Hay que ser buenos conocedores de lo que ocurre a nivel de las concesiones forestales. Identificar aquellas concesiones que son un modelo para muchas otras y desarrollar todos los mecanismos de trazabilidad y de control en la cadena de valor, para garantizar que la madera de origen sostenible pueda llegar a los mercados europeos.

A nivel del mercado, por ejemplo, hemos organizado este 7 de abril un webinario para explicar a las empresas españolas el papel de la certificación en el EUTR. Hemos tenido bastante audiencia, con más de un centenar de empresas conectadas.

¿Está siendo útil para alcanzar vuestros objetivos la marca “Fair & Precious”?

La marca “Fair & Precious” ha madurado. Recordemos que tiene por objetivo promover a nivel de los mercados europeos la madera tropical certificada. La madera tropical no ha sido hasta ahora una prioridad en los esquemas de certificación FSC y PEFC a nivel europeo. Las cosas pueden cambiar, y creo que poco a poco están yendo de otra manera. Lo que hemos hecho con “Fair & Precious” ha sido apoyar tanto el FSC como el PEFC para suplir la falta de comunicación y de promoción que estos esquemas de certificación han llevado a cabo en Europa, y apoyar este desarrollo.

FSC y PEFC Internacional son socios de la marca “Fair & Precious”. La reconocen y participan de diferentes maneras en los contenidos que publicamos tanto en las redes sociales como en nuestra propia web, que contribuyen a dar contenido a esta marca. Sumamos cada año en torno a 150 publicaciones, una presencia continua en las redes sociales y, sobre todo, un trabajo de información a nivel de mercado, de lo que hacen y saben hacer los operadores certificados, que venden en el mercado europeo madera certificada.

¿Cómo está respondiendo el mercado español a la marca “Fair & Precious”?

Me sorprende que son muy pocas las empresas españolas interesadas por la madera tropical que interactúan con nosotros. Esto no quiere decir que no las haya. En los últimos años, siempre ha habido alguna empresa que ha llegado a ser miembro de la Asociación, y que se mantiene en ella.

El escaso número de empresas miembros de ATIBT también se debe a la falta de promoción de la madera certificada en España.

En los mercados europeos, la madera tropical certificada tiene un peso en Escandinavia y Países Bajos (por encima del 70%). En el Reino Unido el porcentaje se acerca al 50%. Pero en Francia no llega al 15%, y en España estamos tan solo en torno al 7% de consumo de madera tropical certificada.

Con todo, la madera tropical certificada tiene muy escasa visibilidad en el mercado español. Pero nuestro trabajo es apoyarla y promoverla. Sobre todo, hacer que en los mercados públicos haya más interés por ella. Que poco a poco en los pliegos de condiciones de los proyectos se incluya como requisito la exigencia de que la madera empleada sea certificada.

¿Qué logros ha sumado ATIBT en materia de desarrollo sostenible en los últimos años?

Las empresas forestales que producen madera tropical históricamente nunca han comunicado lo que hacen o su forma de hacer el trabajo. No lo han hecho. Y hasta que nació la marca “Fair & Precious” de la ATIBT, no ha habido ninguna iniciativa de marketing y de promoción de la madera tropical en los mercados europeos.

El consumo de madera tropical se derrumbó a raíz de la crisis financiera del año 2008. Como todos los mercados madereros. Y el que nunca recobró toda su fuerza fue precisamente el mercado de la madera tropical. Entre otras razones, por el coste de esta materia prima. La madera tropical es un lujo, un producto de alto valor.

Asistimos a un desarrollo de mercado basado en las maderas de Europa del Norte, que son más baratas y más abundantes. Y más acordes con el mundo de la construcción, sobre todo a nivel estructural.

Las maderas tropicales han perdido terreno. A esto hay que sumar que las maderas tropicales han sido objeto de campañas de desprestigio y ataque, por parte de organizaciones que han apuntado a las malas prácticas que, todo hay que decirlo, han existido.

¿Conoce el mercado que existen empresas que gestionan el bosque tropical correctamente?

Efectivamente, sí que existe una serie de operadores que trabajan y funcionan de una forma legal y totalmente acorde a una política de gestión sostenible.

El hecho de que existan malas prácticas en algunos países no significa que no haya que reconocer lo que otros hacen bien.

El sector de la madera tropical en los países productores como Camerún, Gabón o el Congo es la primera fuente de empleo. Incluso muy por delante de otros sectores como el petróleo, al cual cuadruplican en número de trabajadores.

Es fuente de empleo, fuente de riqueza y de divisas. La existencia de esta economía forestal hace que los gobiernos de estos países estén interesados en mantener su bosque natural. Si no hay economía forestal la decisión es, tarde o temprano, convertir estas superficies en plantaciones de palma, cacao, etc.

Hay que dar valor al bosque, hay que consumir de una forma responsable y hay que animar a los países productores a que continúen llevando a cabo una política de gestión forestal sostenible, ayudándoles a luchar contra las malas prácticas y contra la madera ilegal.

¿Qué otras acciones han podido ir desarrollando ATIBT en estos últimos años?

Estamos desarrollando especialmente la formación profesional. Desde hace un año, estamos implementando un ambicioso proyecto en los países de Africa central, con centros y profesionales, formando a formadores para que el desarrollo industrial y la mejora de la transformación de la madera in situ se pueda beneficiar también de competencias locales.

Para el año 2022, los países de la CEMAC han previsto prohibir la exportación de madera en tronco. Con el objetivo de que el valor añadido de la madera y su transformación se quede en Africa. Y que los países productores avancen en la segunda y tercera transformaciones de la madera. Para que puedan llevar a cabo inversiones, tiene que haber personal preparado y jóvenes a quienes interese el mundo de la madera, y estén formados.

Actualmente hay muchas empresas asiáticas que se instalan en Gabón, que traen sus propios trabajadores chinos o indios. Entendemos que en un primer tiempo sea necesario suplir la falta de personal con trabajadores extranjeros, pero tarde o temprano queremos que sea la propia mano de obra de los países productores la que pueda contribuir y beneficiarse de este desarrollo.

¿Crece el peso de la ATIBT como interlocutor necesario para hablar sobre madera tropical?

Creo sinceramente que ha crecido. Hemos ido manteniendo el número de asociados, incluso incrementándolo. La asociación ha ganado visibilidad; tenemos presencia continua en Camerún, Gabón y Congo, e interactuamos de manera muy estrecha con las autoridades de diferentes países y con el sector privado que representamos. También mantenemos relación con las asociaciones de profesionales de los países productores y los representantes del sector privado en cada país. Y tenemos con ellos intercambios de información, de manera continua. Si hablamos de Africa Central y Africa del Oeste, podemos decir que somos verdaderamente el referente y representante de todo un sector forestal maderero profesional en estos países.

Nuestra presencia en América Latina es mucho más débil. Y estamos estrechando lazos con las asociaciones malayas, que quieren sumar esfuerzos con nosotros para la promoción de la madera tropical en los países europeos.

Para concluir, le pedimos que transmita un mensaje a las empresas y profesionales de la madera en España, sobre los bosques y la madera tropicales.

Que sepan darle valor a la madera tropical de origen sostenible. Detrás de la madera tropical de origen sostenible hay personas, hay familias, que viven de ello.

Vivimos extremadamente preocupados por los problemas que conllevan los intensos flujos migratorios a Europa; tenemos la obligación de contribuir de todas las maneras posibles a que las personas encuentren trabajo y puedan acceder a un nivel de vida cada vez mejor en los países productores. La madera es excelente en este sentido, porque da trabajo a mucha gente. Los países africanos están auto consumiendo cada vez un poco más su propia madera, pero siguen necesitando la exportación.

Que el mercado español no tema consumir madera tropical, siempre que sea legal y de origen sostenible. Si se pide la opinión al consumidor final, acerca de la madera tropical, la mayoría nos dice que no quieren contribuir a la deforestación. La madera no es el primero ni el segundo ni el quinto causante de la deforestación. La deforestación la causan la agroindustria y la agricultura. El consumo de madera de origen sostenible es garantía de conservación de bosques naturales.

Desde ATIBT animamos al consumidor a que conozca el valor de la madera tropical de origen sostenible, que conozca el valor de la certificación, que se interese por ello y que no tema por consumir productos realizados con esta materia prima.