PERAT es una carpintería tradicional, ubicada en la localidad ilerdense de Almacelles, que poco a poco está introduciendo herramientas modernas para fabricar de una forma automática.

Armarios y mobiliario a medida, con melamina o lacado y también en madera maciza; todo ello con un toque personal en los acabados. Sin escatimar en la calidad de materiales, herrajes y componentes.

Priman la cercanía, la personalización… En definitiva, hacer algo diferente para su cliente.

Daniel Perat Ribó cursó dos ciclos medios de carpintería y trabaja en el oficio desde los 16 años, cuando empezó a hacer prácticas en un taller hasta 2011. Entonces se hizo profesional autónomo. “Mi antiguo jefe, mi gran maestro con quien trabajé durante diez años, no era partidario de incorporar nuevas máquinas en su empresa -rememora Daniel Perat-. Entretanto, yo veía claro que nos quedábamos atrás, respecto a la competencia”.

En 2018 PERAT adquiere un centro de mecanizado HOLZ HER, mod. “Evolution”, gobernado desde la oficina con el software CABINET CONTROL. Esto es, el sistema implantado con éxito por AIRMATIC en muchas carpinterías de toda Cataluña.

Con poca mano de obra de vocación y de oficio a disposición de las empresas, quienes sí han seguido adelante como Daniel Perat han comprobado cómo la nueva tecnología puede suplir incluso a oficiales de taller. Sin dejar de lado la personalización, presentando correctamente los proyectos e imprimiéndoles diseño y buen gusto.

“No se puede comparar organización de la fabricación y acabados con la forma de trabajar artesanal” –afirma rotundo el joven empresario de Almacelles-. El tiempo que ahorras y los errores que evitas cuando haces un mueble”.

Con el CABINET CONTROL, Daniel Perat puede ver en 3D lo que va a fabricar en el taller. Tres días en AIRMATIC y una semana en PERAT, ayudado por un técnico de la prestigiosa firma de Sabadell bastaron para lanzar a este joven carpintero ilerdense a competir en el mercado, con todas las garantías de éxito. “Corre de mi cuenta avanzar y progresar día a día, dominando el programa y afrontando retos nuevos, para ser cada vez mejores –nos dice Daniel Perat-. No hay marcha atrás, ya no concibo mi carpintería sin el sistema AIRMATIC”.

PERAT es ahora más productivo en sus horas de trabajo. El perfil de su cliente es el particular, más las empresas del pueblo y la comarca, que le conocen y cuentan con su servicio al acometer una obra o hacer una reforma. El boca a boca es fundamental para reforzar y propulsar el prestigio de la carpintería. PERAT es una empresa pequeña, pero tiene una capacidad y una calidad en el producto que nada tiene que envidiar a muchos talleres mayores.

Había que hacer rentable el negocio, y “Daniel lo vio claro desde el primer día. Muchos otros tienen dudas, pero él absorbió la información y tomó una decisión muy rápida, que al final ha sido una ventaja para su empresa -asegura Enric Farré, delegado de AIRMATIC en la provincia de Lérida-. La relación de Dani Perat con AIRMATIC es clara, directa, fácil y beneficiosa para todos. Es receptivo; escucha y valora lo que le proponemos para ayudarle a crecer y a mejorar”.